Tavernes de la Valldigna ya se ha consolidado como ciudad de festivales. A lo largo del año, el municipio acoge tres grandes eventos musicales, tanto en el pueblo como en la playa: El Festivern, Iboga Summer Festival y Mediterránea. A estos se suman otros de menor formato como el Sete Sois Sete Luas, Pop al Carrer o el Sona Baixet Fest. Con todo, el Gobierno local, con su alcalde Sergi González al frente, ha trabajado estos días en Fitur para que la localidad tenga una presencia destacada en el pabellón destinado a las ciudades de la Comunitat Valenciana que acogen festivales.

El primer edil mantuvo una reunión con Daniel Arnal, técnico de Promoción de Turismo de la Generalitat y que es responsable de la promoción de los festivales como eventos turísticos. El representante del Consell vio con buenos ojos la propuesta de que la capital de la Valldigna dispusiera de un estand propio en la próxima edición de Fitur.

Así, el municipio se codeará con ciudades como Benicàssim, que acoge, entre otros, el FIB y el San San Festival, Cullera, que tiene el Medusa, o Gandia, que ofrece este año la tercera edición del Pirata Rock. Para González, «supone una noticia muy importante, ya que nos permite tener visibilidad junto al resto de ciudades que acogen festivales».

Miles de personas visitan cada año la localidad gracias a los festivales musicales, que posicionan turísticamente Tavernes, especialmente en el caso del Iboga y el Mediterránea, cuyo principal atractivo es su cercanía con el mar, lo que es muy bien recibido por los asistentes, que tienen la oportunidad de disfrutar de la playa cuando no hay conciertos.