Mientras cientos de personas conmemoraban el domingo, de forma reivindicativa y festiva, el Dia Internacional de la Dona, otros se dedicaban a provocar. El mural feminista que se encuentra en una de las paredes del solar en el que se construirá la ampliación del instituto Ausiàs March ha sido atacado. Los vándalos han utilizado pintura amarilla para dibujar una esvástica que, en contraste con el morado que predomina en todo el mural, tapa el símbolo del movimiento feminista, que es un puño cerrado dentro del círculo que corona el signo femenino.

El concejal de Cultura, Nahuel González, quien en la pasada legislatura fue uno de los impulsores del Serpis Urban Art, anunció ayer que el ayuntamiento estudia denunciar los hechos. «Estas acciones demuestran que hace falta reivindicar el feminismo y que artísticamente hay que defender la igualdad». Para González, «esta minoría de intolerantes tiene poco que hacer en una ciudad que camina unida por la igualdad y la fraternidad».