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La Fundación de la Colegiata de Gandia denuncia el «abandono» del edificio

Los responsables reconocen que no tienen dinero para invertir y apuntan que la situación «es grave y peligrosa» - La entidad reprocha la actitud de las instituciones pese a que en muchos años no ha celebrado reuniones del patronato

La Fundación de la Colegiata de Gandia denuncia el «abandono» del edificio

Hace quince días los cascotes caídos junto a la Puerta de Santa María de la Colegiata de Gandia obligaron a cortar ese acceso al templo gótico. Ayer nadie se había dignado ni siquiera a recoger los trozos desprendidos a pesar de que las vallas instaladas cortan parcialmente el acceso desde la plaza Major a la calle de la Confraria de l'Assumpció.

En ese abandono se encuentra la primera iglesia de Gandia, cuya parte más antigua data del siglo XIV. Y eso es lo que ayer quiso trasladar la Fundación para la Restauración de la Colegiata, un organismo que, como también reveló este periódico, no ha reunido a sus patronos en los últimos años y ha permanecido prácticamente sin actividad.

El presidente y el secretario de dicha fundación, Francisco Mas y Francisco Ferrer, respectivamente, no minimizaron el problema. «La situación es grave, incluso peligrosa», señalaron, al tiempo que, una y otra vez, descargaban la mayor parte de la responsabilidad sobre la Administración y no sobre la propiedad del edificio, el Arzobispado de València. Así, denunciaron «la dejadez de las instituciones públicas» que forman parte de la fundación, en clara referencia al Ayuntamiento de Gandia, la Diputació de València y la Generalitat.

Especialmente molestos se mostraron con el ayuntamiento, al que se refirieron como «la administración más próxima físicamente» pero también «la más alejada en calor y en proyectos», echando en falta proyectos para restaurar un templo que es Bien de Interés Cultural y Monumento Nacional desde 1932 y que, a la vista está, sigue deteriorándose cada día que pasa. En esa relación de reproches indicaron que, pese a saber que el ayuntamiento ha llevado a cabo informes técnicos, «nunca hemos tenido conocimiento de ellos».

De las palabras de Mas y Ferrer se evidencia la absoluta incomunicación entre los representantes de la inactiva Fundación de la Colegiata, que tampoco ha podido conseguir financiación externa para las obras que deben acometerse. El presidente y el secretario de la fundación incluso incorporaron un halo de misterio por la «desaparición» del proyector que iluminaba la Puerta de los Apóstoles, que costó 25.000 euros.

Goteras, humedades, desprendimientos, fallos y deficiencias en el sistema eléctrico, figuras religiosas que dan a la plaza dels Apòstols rotas a balonazos desde la calle, e incluso robos de objetos figuran en el relato que ayer hicieron Mas y Ferrer.

«En 2018 enviamos una carta a todos los partidos políticos de Gandia con los elementos que debían restaurarse», pero, según añadieron, no hay respuesta. El presidente y el secretario anunciaron que el próximo mes de junio convocarán una reunión del patronato de la Fundación que se anunciará públicamente.

El Ayuntamiento: "No hemos sido convocados al menos en los últimos cinco años"

El Ayuntamiento de Gandia respondió ayer a este comunicado señalando que «comparte» la preocupación de la Fundación de la Colegiata por el deterioro del edificio y añadió que el departamento de Urbanismo «ha emitido diferentes informes dirigidos al Arzobispado, propietario del inmueble, alertando de la peligrosidad de la caída de cascotes y de los desperfectos».

En la nota del consistorio, que evita entrar en polémicas, recuerda que las administraciones «disponen de líneas de subvención para la rehabilitación de patrimonio a las que se pueden presentar organismos e instituciones», animando a la Fundación a presentarse a esas ayudas para reparar el edificio.

Finalmente el ayuntamiento asegura en su comunicado que, «al menos en los últimos cinco años», no ha sido convocado a una reunión de la Fundación y, por tanto, no ha podido participar de forma activa en ese organismo.

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