Uno de los ejemplares del proyecto de Reintroducción del Águila Pescadora en la Comunitat Valenciana, que se inició en 2019 en el parque natural del Marjal Pego-Oliva falleció el 14 de julio pasado en Galeras (Granada) por causas que se desconocen. Un técnico de este programa ecológico de la Junta de Andalucía la encontró muerta entre la vegetación.

Según los técnicos del proyecto el ave, que había sido bautizada con el nombre de Bullent, tuvo un comportamiento extraño. Tras su liberación no practicó piruetas, vuelos, picados sobre el agua y tampoco había aprendido a comer fuera de la jaula, lo que seguramente desembocó en su muerte. Este ejemplar había nacido en Guadalcacín, Cádiz, en mayo de este año y llegó al marjal de Pego-Oliva el 23 de junio. Dos semanas después fue puesto en libertad en ese ambiente.

Sus «compañeras», las águilas Bruc y Odiel, sí que realizaron vuelos cortos alrededor de la Muntanyeta Verda, alimentándose en los cebaderos. A principios de septiembre Bruc inició su migración hacia el sur. Salió del marjal el 8 de septiembre y llegó hasta Marruecos.

Mientras tanto, Odiel ha estado más a gusto en el marjal con otras dos águilas pescadoras que han hecho una parada breve en su camino a latitudes más meridionales. También en septiembre inició el viaje hacia el sur, a la espera de conocer si regresará cuando lleguen los primeros fríos.

Este año 2020 el proyecto de Reintroducción del Águila pescadora en la Comunitat Valenciana ha contado con un programa de voluntariado al que se han inscrito 43 participantes, de nuevo dirigido y coordinado por la Fundación Migres y con la colaboración de la empresa medioambiental comarcal Magic&Nature que se han encargado de la gestión del programa.