Los organismos que velan por que las actividades económicas se desarrollen en un marco de igualdad entre los operadores y respeto a las normas de competencia no solo están pendientes de las grandes fusiones corporativas o de los sectores estratégicos. También hay disputas por las ventajas en mercado con negocios ambulantes.

Es lo que ha pasado en el recinto ferial de Gandia, que estos días debería están celebrando sus fiestas en honor a Sant Francesc de Borja, y que recientemente ha sido objeto de análisis por parte de la Comisión de Defensa de la Competencia de la Generalitat valenciana.

Todo comenzó en febrero de 2018, con la denuncia de un feriante autónomo de la Asociación Provincial de Industriales Feriantes de València ante el Ayuntamiento de Gandia. Este feriante, titular de un negocio de mojitos y coctelería, señalaba que en el pliego de condiciones que rige la concesión administrativa del recinto ferial del Parc Ausiàs March aparecían «conductas que podrían constituir una infracción de las normas de competencia». «Condiciones desiguales ante situaciones idénticas para los feriantes del recinto», señalaba la denuncia.

¿De qué se trataba? La denuncia se refería a una cláusula del pliego que prohíbe la «venta de bebidas alcohólicas, excepto cerveza, en todo el recinto ferial, excepto en las instalaciones autorizadas como ‘Bar’ o ‘Montroy’». Además, en las casetas de tiro de botellines solo se podrían entregar como premio botellines con alcohol a mayores de 18 años, reza el documento.

El denunciante considera que dicha cláusula impone condiciones desiguales para feriantes que se encuentran en situaciones similares, ya que quienes tienen parcelas dedicadas a la actividad de venta de coctelería y mojitos, su caso particular, no pueden vender bebidas alcohólicas. De repente, no podía servir lo que prometía, mientras al lado, otros licenciatarios sí que podían hacerlo.

La explicación de esta limitación por parte del ayuntamiento tiene que ver con la seguridad. «Según informa el Ayuntamiento de Gandia (a la CDC), el planteamiento por el que se ha eliminado la posibilidad de instalar parcelas dedicadas a la venta de cócteles y mojitos responde a cuestiones relacionadas con la seguridad y con la voluntad de acotar la venta de alcohol únicamente a los espacios ‘bar’ y ‘Montroy’», cita el informe de la Comisión de Defensa de la Competencia emitido este verano.

«El ayuntamiento alude a la experiencia de ediciones anteriores de las fiestas patronales de Sant Francesc de Borja, especialmente en lo que concierte al consumo de alcohol por el público juvenil en el recinto ferial parc Ausiàs March», añade la comisión.

Competencia, según concluye en su informe, no entiende que se hayan violado los artículos de la ley de Defensa de la Competencia que se señalan en la denuncia, con lo que no abre expediente sancionador al consistorio, pero sí cuestiona el comportamiento de Gandia.