Ni un mes ha tardado la Conselleria de Cultura en reaccionar tras hacerse pública, por una información de Levante-EMV, la precaria situación en la que se encuentra un espacio tan emblemático e importante para el patrimonio valenciano como es el Monestir de Santa Maria de la Valldigna, de Simat, cerrado a visitas porque en diciembre del 2019 se desprendieron parte de unos arcos, que no han sido reparados.
Los tres alcaldes que forman parte actualmente de la Mancomunitat de la Valldigna, Josep Antoni Alberola, de Benifairó y que es presidente de la entidad, el de Simat, Víctor Mansanet, y el de Barx, Miquel Donet, mantuvieron ayer una reunión con la secretaria autonómica de Cultura y Deporte, Raquel Tamarit, y la directora general de Cultura y Patrimonio, Carmen Amoraga.
En el encuentro las representantes del Consell una inversión de 300.000 euros para llevar a cabo actuaciones «de urgencia» en el interior del recinto que, entre otras cosas, servirán para reparar los graves desprendimientos que sufrieron los arcos ubicados entre la iglesia y el refectorio, que provocaron el cierre a visitas de la zona más importante del monasterio cistercense de Simat.
La partida no contempla la instalación de los florones que están guardados desde hace años en un altillo de la iglesia
Esas actuaciones también servirán para retirar la higuera que ha crecido en el campanario de la iglesia y también se reforzará la escayola del propio templo, que debido a las humedades ha sufrido pequeños desperfectos en los últimos tiempos. Se espera que estas actuaciones arranquen el próximo mes de noviembre con un coste de 50.000 euros.
Estas actuaciones permitirán que al menos se pueda abrir el monasterio para poder abrir sin peligro de que el desprendimiento de elementos arquitectónicos afecten a las visitas.
Habrá también una partida para el mantenimiento de los edificios, se trata de elementos de mejora como la detección y solución de goteras o el acondicionamiento del cuadro eléctrico.
Además, la Conselleria se compromete a que durante los primeros meses de 2021 se llevarán a cabo las obras de accesibilidad necesarias para garantizar la apertura del monasterio de manera habitual para los visitantes. Estas mejoras supondrán una inversión de 200.000 euros por parte de Cultura de la Generalitat.
Para el próximo año, 2021, se elaborará un proyecto integral que servirá para acometer actuaciones de rehabilitación patrimonial del monasterio.
En palabras de Raquel Tamarit, «es necesario que dispongamos de una guía general que nos dé una nítida radiografía de la actuación global que necesita el monasterio de la Valldigna en cuestiones puramente patrimoniales para poder emprender de manera calendarizada y ordenada lo que sea necesario», señalaba.
Así, la Generalitat ha dado un paso adelante a la hora de dar valor al que se considera uno de los grandes monumentos de la Comunitat Valenciana después de años en los que prácticamente no se había invertido nada.
Los municipios de la Valldigna, de hecho, reclaman poder tener más acceso al recinto para, por ejemplo, encargarse del mantenimiento de los jardines, algo a lo que se ha ofrecido el ayuntamiento de Simat para evitar que los plazos se alarguen y que el monasterio acabe presentando un aspecto descuidado.
La Generalitat invierte 100.000 euros al año en la programación cultural del monasterio, que está gestionada por la Mancomunitat de la Valldigna.
