Unas trescientas personas convocadas por entidades feministas se concentraron en la plaza Major de Gandia para condenar las agresiones sexuales a mujeres, y concretamente la última, que afectó a una menor, ocurrida en Gandia. En la lectura de un comunicado también pidieron cambios en la educación sexual y en el acceso a la pornografía como instrumentos para combatir estos delitos.