El presidente de Divalterra y delegado de Desarrollo Rural y Políticas contra la Despoblación en la Diputació de València, Ramiro Rivera, visitó ayer, junto al alcalde de Oliva, David González, la zona afectada por el incendio del pasado 2 de octubre en la montaña de Santa Anna. La visita tenía la intención de coordinar con el ayuntamiento los trabajos de mantenimiento de la zona dañada. En el encuentro también estuvieron presentes la vicealcaldesa, Ana Morell, y el concejal responsable de Planificación Urbanística, Miguel Monzonís.

Las brigadas forestales de Divalterra llevaron a cabo una primera intervención de emergencia durante los días posteriores al fuego y se procedió a la retirada de los pinos afectados que se encontraban en el colegio la Carrasca para evitar que pudieran caer en el centro escolar.

Los trabajos fueron ejecutados por las brigadas forestales de la Font d’En Carròs, Barx y Xeresa en esta zona emblemática del municipio que cuenta con un bosque periurbano alrededor del cual se encuentra el núcleo poblacional.

Ahora el ayuntamiento trabaja en un plan para la recuperación y la regeneración de la zona, junto a la Generalitat Valenciana y la Universitat Politècnica de València, en el que también colaborarán las brigadas forestales de la Diputació.

La intervención de Divalterra en este entorno supondrá la ejecución de tareas de mantenimiento en la interfaz colindante al colegio y a una zona cercana de viviendas que tuvieron que ser desalojadas en el incendio.

Precisamente la cercanía de núcleos habitados y del colegio la Carrasca convierten esta actuación en prioritaria, con el fin de incrementar la seguridad de las personas que circulan por la zona.