El Gobierno local de Almoines ha llegado al límite. Está harto de los actos vandálicos que cuestan mucho dinero a las arcas públicas. Por eso, como ayer confirmó a Levante-EMV el alcalde, Joan Cardona, el ayuntamiento ya ha iniciado los trámites para instalar cámaras de seguridad en diferentes puntos de la localidad. El primer objetivo es poder identificar a las personas que causan daños al mobiliario urbano o llevan a cabo otro tipo de acciones incívicas, como no utilizar correctamente los contenedores, hacer vertidos incontrolados en las calles de la ciudad o, por ejemplo, robar cobre, como ocurrió hace unos días, dejando el 25% de la vía pública completamente a oscuras.

En segundo lugar, lo que pretende esta medida es causar un efecto disuasorio en aquellos a quienes se les pase por la cabeza llevar a cabo algún acto vandálico en elementos del municipio. En concreto, el consistorio cuenta con un proyecto para instalar entre 18 y 20 cámaras en todo el casco urbano para evitar no solo este tipo de actos que causan daños al mobiliario urbano del municipio, sino también el hallazgo de trastos, escombros, seguridad en las calles, tráfico y otras cuestiones que preocupan al Gobierno local de Units x Almoines. Alguno de los puntos donde se instalará las cámaras son el nuevo y viejo colegio, el polígono industrial o la carretera.

Joan Cardona detallaba que la Policía Local del municipio ya tiene el informe redactado donde se justifica el motivo por el que cada cámara debe ir instalada en cada lugar concreto. Esa propuesta se enviará a la Delegación del Gobierno, que es la que debe autorizar, o no, la colocación de estos dispositivos.

Y es que la instalación de cámaras de seguridad está muy regulada por ley por cuestiones de protección de datos, derecho a la intimidad y otro tipo de normativas, por lo que la Delegación del Gobierno debe estudiar muy bien los motivos por los que un ayuntamiento pretende instalar cámaras para vigilar sus calles.

El Ayuntamiento de Almoines quiere hacer hincapié especialmente en aquellos puntos del municipio que están más ocultos. «A parte de los daños que se causan en el mobiliario urbano, está el tema de los desechos. Por la calle han aparecido inodoros, somiéres, colchones, televisores y otros enseres», explicaba Joan Cardona.

Pero lo que ha colmado la paciencia del Gobierno local es el acto vandálico que ha sufrido el espacio de ocio ubicado junto al río Serpis. El pasado fin de semana alguien se «divertía» arrancando la puerta y el grifo de un pequeño cuarto de baño que no hacía ni una semana que se había construido. La obra, con un coste de 10.000 euros, ha sido sufragada con una ayuda de la Diputación de València y, según explica el propio consistorio, se trata de un proyecto que se ha gestado y ejecutado en cuatro años. Estos trabajos también incluían la instalación de un cercado en la zona de barbacoa, que ahora está clausurada debido a las restricciones del covid.

Desde el consistorio señalan que este tipo de acciones «no representan» a los vecinos de Almoines y piden colaboración a todos aquellos que hayan podido ver algo para que lo hagan saber a las autoridades y así actuar en consecuencia. Este tipo de actuaciones cuestan mucho dinero que sale del bolsillo de todos los contribuyentes, es decir, los vecinos y vecinas de Almoines.

Cada vez son más los municipios que se suman al hartazgo por los cada vez más habituales actos vandálicos. Ayuntamientos como Benifairó o Tavernes de la Valldigna lo han denunciado públicamente en reiteradas ocasiones. La capital vallera llegó a colocar el precio de cada elemento de mobiliario para concienciar a la gente. Simat, por su parte, ha decidido dejar de reparar aquellos elementos que hayan sido destrozados en actos vandálicos, para que, de ese modo, los vecinos y vecinas se conciencien de cuál puede ser la situación si se sigue con esa actitud, es decir, acabar no teniendo nada. Hace unos días el Ayuntamiento de Beniarjó denunciaba la aparición de muebles y electrodomésticos tirados en plena calle, cuya recogida acaba generando muchos costes al consistorio.