Seguir apostando por la movilidad sostenible, dando cada vez más protagonismo al peatón y a los desplazamientos en bicicleta. Ese el es objetivo con el que el Ayuntamiento de Guardamar de la Safor ha iniciado las obras de un bulevar en la carretera que une el casco urbano del pueblo con el de la playa y conecta con la de Daimús. Se trata de un proyecto que, en total, costará 600.000 euros, aunque se ejecutará en dos fases, como explicaba a Levante-EMV la alcaldesa, Anabel Ferrer.
En la primera, que ya está en marcha, se invertirán 80.000 euros, mientras que la finalización del proyecto tendrá un coste de 520.000. Esta obra tiene prevista la conexión de las dos áreas de protección medioambiental que tiene la localidad, como son los Ullals de Guardamar de la Safor y la zona LIC de las dunas. Lo que se pretende con esta actuación es «impulsar de forma decidida el esparcimiento de los vecinos y vecinas de Guardamar de la Safor así como los vecinos que visitan el municipio», señalan desde el Gobierno local.
La primera fase, que es la que está en obras en estos momentos, arranca donde empieza el suelo urbanizado de la playa. En este tramo, el sendero peatonal se conectará con el paseo fluvial que ya existe en estos momentos, mientras que el carril bici se ejecutará sobre la calzada actual, en situación elevada al igual que las aceras, explican desde el consistorio.
La segunda fase pretende ampliar el actual carril bici y sendero peatonal de calzada compartida de 3 a 9 metros y contará con una zona de descanso y ajardinada, un sendero peatonal de 2,5 metros de ancho y una zona para arbolado. La segunda fase se iniciará en el año 2021 tras la adquisición de los terrenos necesarios. Se espera que las obras finalicen en otoño del próximo año.
En palabras de la Alcaldesa de Guardamar de la Safor Anabel Ferrer, «estamos ante el inicio de uno de los proyectos estratégicos de futuro de Guardamar de la Safor, con esta obra no solo se potencia el esparcimiento de los vecinos y vecinas de Guardamar de la Safor sino que pone en valor dos de los principales atractivos medioambientales». Ferrer confía en que esta infraestructura «potencia la vida saludable en nuestra población» y sirva para concienciar medioambientalmente de «la importancia que tienen estas dos zonas para el equilibrio territorial y nuestro bienestar como sociedad», señalaba. El ayuntamiento prepara para un plan de movilidad urbana sostenible que dirija esta política que sirve para fomentar el cuidado medioambiental.
