Un mensaje de WhatsApp enviado masivamente permitió ayer conocer la situación «extrema» en la que se encuentra el hospital Francesc de Borja de Gandia debido a los ingresos y atenciones por coronavirus. No fue redactado por alguien cualquiera, sino por el director de enfermería del propio centro, Jesús Ribes, quien en su escrito, que no tardó en viralizarse y correr de móvil en móvil, incluso pedía «Socorrooooooooooo».

En el mensaje informaba de que quedaba «abierta una cuarta planta con postivos» y alertaba de que «el hospital está colpasado». Sorprendía, además, que tratándose de una persona con relación directa con la Conselleria de Sanitat se preguntara: «¿alguien puede presionar para que cierren todo lo que genere cúmulo de personas?».

Ribes, cuyo escrito iba firmado por él mismo y se confirmó que lo había mandado a algunos contactos, explicaba que «los positivos en la calle han crecido de forma exponencial, fruto de las relaciones sociales de días previos a cena de Nochebuena, y desde ayer el aumento está siendo mayor por el efecto de las reuniones familiares de Nochebuena».

También lanzaba un mensaje verdaderamente preocupante al apuntar que «comienza a morir gente por no poderles atender ni cuidar como profesionalmente deberíamos» y alertaba de que «el porcentaje de sanitarios contagiados crece y cada vez tenemos menos recursos humanos para atender en condiciones».

Ribes pide a sus contactos que se queden «en casa» y que en ella «se sigan manteniendo las medidas de seguridad de separación entre familiares, las mascarillas adecuadas y solo retirárselas en el momento de la comida y el menos tiempo posible».