Los ‘riders’ de Gandia alzan la voz

Actualmente desarrollan su labor como repartidores de comida a domicilio en la ciudad de Gandia una treintena de autónomos. Son los cálculos que hace el colectivo en boca de su portavoz, Vincenzo d’Andrea, porque las plataformas no dan cifras oficiales.

Una gran parte de ellos participó ayer en la concentración para protestar contra el borrador de laLey de Plataformas Digitales.

En la capital de la Safor, actualmente, existen alrededor de 40 restaurantes que mantienen convenios con las plataformas para entregar comida a domicilio, algo de lo que se encargan los «riders» dependiendo de si trabajan para una u otra plataforma.

D’Andrea explica que Gandia es una ciudad donde el movimiento «rider» aún es emergente pero que tiene mucho potencial y posibilidades de crecer.

Con la actual oferta, señala, es fácil que puedan asumir el trabajo la treintena de riders existentes, aunque «si se sumara algún restaurante más», seguramente nos harían falta más ‘riders’ para asumir todo el trabajo. No se trata solo de que llegue el pedido a la casa en cuestión, sino que lo haga en buenas condiciones. Por eso apenas reparten en otros municipios de la Safor, porque no pueden garantizar que los alimentos llegarán en las condiciones óptimas.

Entre los establecimientos que les contratan hay tanto cadenas de comida rápida como restaurantes tradicionales de Gandia.

Hace solo unos meses apenas se veían uno o dos por toda la ciudad, tres a lo sumo. Mientras en València, Barcelona, Madrid, Bilbao, Zaragoza y otras grandes ciudades llevaban mucho tiempo conviviendo con ellos en las calles, en Gandia era raro encontrarse con alguien en bicicleta con una gran mochila en la que se podían leer marcas como Glovo, Deliveroo, Just Eat o Uber Eats. La pandemia lo cambió todo. En realidad, su eclosión empezó un poco antes, a finales del 2019, pero el cierre de la hostelería en la primera ola y la posterior desescalada de primavera obligó a muchos bares y restaurantes a reinventarse y apostar por la comida a domicilio y cambió los hábitos de la ciudadanía.

Los «riders» hoy ya forman parte del paisaje urbano de Gandia. De hecho, van ganando protagonismo al tiempo que las medidas restringen más la movilidad y también los contactos en el sector de la hostelería. Eso ha provocado un importante crecimiento en el número de repartidores. Tanto es así que ya tienen hasta capacidad para organizarse.

El primer paso fue sumarse, ayer, a la convocatoria nacional organizada por la Asociación Profesional de Riders Autónomos (APRA) y Repartidores Unidos para mostrar su descontento con la Ley de Plataformas Digitales, cuyo borrador ya se conoce.

Una veintena de repartidores de las plataformas Glovo, Uber Eats y Deliveroo se concentraron con sus herramientas de trabajo, la mochila y su vehículo, ante el centro comercial La Vital, uno de los espacios que más frecuentan junto al Centre Històric debido a que tienen convenio con varios de los restaurantes allí presentes.

Desde ese punto partió una comitiva formada por motos, coches, bicicletas e incluso algún patinete eléctrico que utilizan para desplazarse desde los restaurantes hasta las viviendas, con el objetivo de hacer mucho ruido. En primer lugar para que la ciudad de Gandia se entere bien de su existencia y en segundo para que conozca los problemas laborales que sufren. Así, haciendo sonar el claxon de los vehículos, y acompañados por la Policía Local, recorrieron diferentes puntos del casco urbano.

Protestaban contra el borrador de la nueva Ley de Plataformas Digitales que quiere aprobar la Ministra de Trabajo. Se trata de un texto que pretende retirarles la condición de autónomos y que se conviertan en asalariados de las plataformas, algo que estos trabajadores rechazan porque supondría «precarizar nuestro trabajo», como explicaba ayer a este periódico Vincenzo d’Andrea, portavoz del colectivo de «riders» de Gandia. «Si nos contratan las plataformas ya no podemos elegir las horas que trabajamos y eso repercutiría en nuestros ingresos», señalaba. Además, el borrador tal y como está no permite que una misma persona trabaje para varias plataformas.

Lo que reivindicaban es una mejora de las tarifas y los pluses (noctunidad, lluvia, etc), negociación colectiva, seguros ampliados y protección ante el cese de colaboración, entre otros aspectos, pero «lo queremos de forma negociada con las plataformas, sin imponernos», señalaba el «rider».

La marcha transcurrió sin mayores problemas, ya que estuvo controlada todo el tiempo por los agentes de la Policía Local de Gandia. Los «riders», que mosstraban entendimiento entre ellos, protestaron en un ambiente distendido tanto durante el recorrido como el tiempo que estuvieron ante el centro comercial. Con el cierre de la hostelería su trabajo se ha incrementado, aunque aseguran que aún queda mucho margen de mejora porque es ahora cuando se está empezando a notar.

30 trabajadores para 40 restaurantes

Los «riders» creen que si aumentan los bares que ofrecen reparto harán falta más autónomos

T.á.c. Gandia