El Consell adquiere en la Font d’en Carròs el mayor paquete de vivienda social de la Safor

La vicepresidencia segunda del Consell y Conselleria de Vivienda, dirigida por Rubén Martínez Dalmau, se fijó como un objetivo básico de esta legislatura la ampliación del parque público de vivienda con el objetivo de dar respuesta a familias vulnerables o que simplemente no pueden pagar una hipoteca o un alquiler en el mercado libre. Y esa pretensión se está cumpliendo plenamente en la Safor, donde, en solo año y medio, se han incorporado al registro de la Generalitat 23 pisos o casas repartidas en seis municipios tras invertir 1,5 millones de euros.

La última de esas compras resulta ciertamente espectacular y por ese motivo el propio vicepresidente Martínez Dalmau se desplazó ayer a la Font d’en Carròs para explicar que, por 700.000 euros y aplicando el decreto de tanteo y retracto, la Generalitat se ha quedado con 13 pisos de un mismo edificio situado en la calle del Beniteixir de esta localidad. Es la mayor adquisición de vivienda en esta comarca, pero también, como señaló a Levante-EMV, una de las más importantes realizadas hasta la fecha en la Comunitat Valenciana.

Acompañado por el alcalde de la localidad, Pablo Puig, y de otros responsables del departamento de Vivienda de la Generalitat, Dalmau explicó que los 700.000 euros invertidos en esta operación sitúan la media por cada piso en los 54.000 euros, «entre un 40 y un 45% por debajo de su valor de mercado», indicó, al tiempo que explicaba que, una vez se realicen las inspecciones técnicas y, si es necesario, el acondicionamiento de los pisos, se destinarán a familias de la Font y de otras localidades, entre las que citó la vecina Oliva, donde se han dado casos de familias que han precisado ayuda para no quedarse en la calle.

El decreto de tanteo y retracto aprobado por la Generalitat, que está recurrido en el Tribunal Constitucional por el PP, permite al Consell intervenir en operaciones inmobiliarias de grandes tenedores de vivienda, generalmente bancos, la Sareb o fondos de inversión, que en algunas ocasiones formalizan compraventas especulativas y que, por su envergadura, impide la participación de particulares. Así, con la capacidad financiera de la Generalitat, se ha conseguido adquirir lotes de pisos por solo un euro, como ocurrió en las localidades de Algorfa (en la comarca de la Vega Baja del Segura) y Agost (l’Alacantí), o por mil euros, caso de varias viviendas de Algemesí (la Ribera Alta).

En la Safor la Generalitat ya ha adquirido mediante tanteo, compra directa o concurso un total de 23 pisos. Los 13 de la Font d’en Carròs, que eran del Banco de Sabadell, cinco en Gandia, dos en Oliva y uno en Beniarjó, Miramar y Tavernes de la Valldigna.

El vicepresidente Dalmau, que ha llegado a gestionar directamente o con su equipo de la conselleria para evitar que algunas familias fueran desahuciadas o buscar alternativa a quienes han tenido que dejar el lugar donde vivían por no poder hacer frente a la hipoteca, al alquiler o porque estaban de okupas, recordó ayer que la Safor es una de esas comarcas con déficit de vivienda, y se mostró muy satisfecho por este lote de 13 pisos de la Font.

También el alcalde la localidad respaldó esta política de adquisición de vivienda aplicada por la Generalitat que sitúa a la Font como uno de los municipios con mayor número de pisos públicos per cápita de toda la Comunitat Valenciana.

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