"Esta situación es insostenible y a nosotros nos han discriminado"

Entre las muchas circunstancias extraordinarias que han derivado de la pandemia del covid-19, sin duda una de las más llamativas ha sido la suspensión, desde el 14 de marzo del año pasado, de todo tipo de actividades sociales y festivas que conllevan la interrelación de muchas personas. Y no solo de fiestas mayores en los municipios, sino también de celebraciones privadas, como comuniones o bodas, que generan un ciclo económico a su alrededor.

Por eso resulta fácil entender la situación que sufren, y que ayer denunciaron, los comercios que se dedican a la confección y venta de vestidos y complementos que se lucen en la mayoría de esas celebraciones, no solo por parte de los protagonistas, sino también de familiares y amigos.

Una decena de responsables de ese tipo de negocios de Gandia acudió ayer a las puertas del ayuntamiento para entregar un escrito en el que exigen que la Administración les tenga más en cuenta a la hora de repartir las multimillonarias ayudas que se están destinando para salvar las empresas más afectadas por la pandemia.

Ana Torregrosa, de la conocida tienda La Cuna y una de las promotoras de esta acción para visualizar el malestar del sector, trasladaba ayer a este periódico el enfado propio y el de sus compañeras por el hecho de que la Generalitat les haya excluido de las ayudas Parèntesi del Pla Resistir. «Nuestra situación es insostenible porque llevamos meses sin poder trabajar», indicaba otra de las asistentes mientras se repartían las instancias que poco después registrarían en el ayuntamiento. En esa petición conjunta solicitan al ayuntamiento que adopte medidas que permitan optar a las ayudas para que no tengan que cerrar establecimientos. Porque, según reconocen, atraviesan por «una situación crítica» y se sienten profundamente «discriminados». Incluso critican que la asociación de comerciantes del Centro Histórico de Gandia no haya ejercido presión ante las instituciones para evitar la exclusión de este plan de ayudas. «No nos representan», indicaba otra de las asistentes al acto.

Efectivamente estos establecimientos no optan al reparto del Pla Resistir, como tampoco el resto del comercio minorista, porque la Generalitat solo ha incluido entre los beneficiarios a las empresas y autónomos que se dedican a la actividad ambulante.

Desde el Ayuntamiento de Gandia el concejal de Políticas Económicas reconoció la difícil situación que está atravesando el conjunto del comercio urbano, pero aclaró que en esta ocasión ha sido la Generalitat la que ha fijado la relación de empresas beneficiarias del Pla Resistir y que desde la Administración local se han limitado a poner la parte que les corresponde y a gestionar los trámites con la mayor celeridad.

Fiestas a partir del verano, la esperanza de reactivar el sector

Si la vacunación avanza a buen ritmo y las medidas de «desescalada» que se adoptarán a partir del mes de marzo no derivan en una cuarta ola de infecciones del covid-19, muchas entidades y ayuntamientos confían en poder celebrar eventos festivos y sociales, así como ceremonias privadas, a partir del verano. Esa es la esperanza del sector que se dedica a «vestir» esas celebraciones y de muchos otros negocios que también viven de los eventos, como floristas, fotógrafos, productores audiovisuales, empresas de cátering, restaurantes y otros que ahora o están al ralentí o directamente cerrados.