La ciudad de Gandia, acostumbrada a reconocimientos autonómicos, nacionales e internacionales en diversos aspectos que afectan a una parte de sus habitantes, acaba de sumar uno que, con toda seguridad, satisface a la inmensa mayoría de la población.
Aunque parezca una exageración, la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) y la Fundación Arbor Day han otorgado al municipio de Gandia el título de «Ciudad Arbórea del Mundo». Lógicamente este reconocimiento se debe al cuidado que la Administración, y por extensión el conjunto de sus ciudadanos, han brindado a esos «habitantes» que no solo decoran las calles, plazas, parques y jardines, sino que también contribuyen, en muchísimos aspectos, a dar calidad de vida.
Gandia es el único municipio valenciano incluido este año en el listado, y del resto de España figuran Madrid, toda el área metropolitana de Barcelona, Alcalá de Henares, Las Rozas, Navacerrada, Sevilla la Nueva, Rivas-Vaciamadrid y Arroyomolinos.
El anuncio llegó desde Lincoln, capital del estado norteamericano de Nebraska, dentro del marco del programa Ciudades Arboladas del Mundo (Tree Cities of the World), destinado a promover urbes más resilientes y sostenibles. 120 ciudades de los cinco continentes han obtenido el reconocimiento.
La concejala de Medio Ambiente, Alícia Izquierdo, señaló ayer a este periódico que este era el primer año en que Gandia aspiraba a este título honorífico, y para ello ha tenido que certificar ante los organizadores proyectos como el de la Anella Verda, el Programa de Educación Ambiental, la inversión realizada para plantación y mantenimiento de zonas verdes, el llamado Pla d’Ombres o la existencia de 19 árboles y 7 arboledas que, en los últimos años, han quedado protegidos para garantizar su pervivencia.
Entre los datos más interesantes de la relación que ha conducido a recibir este premio ambiental figura la existencia de 27 metros cuadrados de zona verde por habitante, el doble de lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud, o la existencia de 206 jardines y casi 20.000 árboles repartidos por calles y plazas. Lógicamente, todo ello es fruto de muchos años de políticas ambientales que han sabido ver en los árboles y en los espacios verdes islas de calidad de vida y un arma para combatir el cambio climático.
El presidente de Arbor Day Foundation, Dan Lambe, ha felicitado a Gandia, y al resto de las ciudades elegidas, porque, con esas acciones, «ahora más que nunca, los árboles y los bosques son un componente vital de las ciudades y pueblos saludables, habitables y sostenibles de todo el mundo».