meteorología. A punto de estrenar la primavera, y pasado ya el ecuador del mes de marzo, la Safor, como toda la Comunitat Valenciana, registró ayer un duro día de invierno, con un brutal descenso de las temperaturas máximas y lluvia que se prolongó, de forma más o menos persistente, durante toda la jornada. Lo más llamativo, desde el punto de vista visual, es esa nieve que cayó en la parte más alta de las montañas. Como se observa en la imagen, tomada desde Gandia, el Circ de la Safor y su cumbre, que alcanza los 1.013 metros de altitud, se cubrieron con una ligera nevada. Lo mismo ocurrió con el punto más alto del Mondúver y en espacios montañosos del interior. Ni siquiera en las horas centrales del día las temperaturas alcanzaron los diez grados, y en numerosas localidades de la llanura central, a menos de cien metros sobre el nivel del mar, los termómetros, a mediodía, rondaban entre los seis y los 8 grados, más propio de enero que de marzo.