Los hosteleros de Tavernes de la Valldigna están muy molestos con el ayuntamiento de la localidad. Según denunciaron ayer a Levante-EMV, aún no han recibido ni un solo euro de las ayudas Paréntesis para paliar los efectos que están padeciendo debido a la crisis sanitaria de la Covid-19 pese a que dicen tener constancia de que el consistorio ya dispone del dinero en sus arcas.
Los empresarios, que se han unido en una asociación ya formalizada, recuerdan que en otros municipios próximos, como por ejemplo Gandia u Oliva, los negocios ya se han beneficiado, en su totalidad o en parte, de un dinero que consideran «vital», ya no solo para que sus establecimientos puedan seguir trabajando, sino para que sus familias tengan un sustento, como explicaban los representantes de la entidad.
A Tavernes le correspondían 400.000 euros, como ya se anunció en su día, de los que cada empresario recibirá 2.000 pero ninguno de los más de 60 asociados ha recibido aún cantidad alguna.
La asociación relata situaciones muy complicadas entre los empresarios de la hostelería tanto del pueblo como de la playa hasta el punto de que «hay compañeros que lo que sacan de caja cada día lo necesitan para comprar comida para sus hijos», señalan los empresarios.
Explican que han contactado con el alcalde, Sergi González, en varias ocasiones para solicitarle el cobro de las ayudas y que este justifica la tardanza en cuestiones burocráticas del departamento de tesorería.
El alcalde, Sergi González, explicaba ayer a este periódico que la demora se debe a que «el ayuntamiento debe cumplir unos plazos para obtener garantías de que se todo se hace de manera correcta a nivel jurídico».
El responsable de la hacienda municipal aseguraba que «hemos acelerado los plazos al máximo» pero insistía en que es necesario que las resoluciones pasen unos trámites administrativos antes de que lleguen a los empresarios. El alcalde asegura que Tavernes está en la línea «de la gran mayoría de municipios» en cuanto a los plazos y confía en que las ayudas se puedan abonar la segunda quincena de mayo.
González asegura que el ayuntamiento que dirige no quiere saltarse ningún trámite para que todo el proceso cuente con la cobertura legal necesaria para evitar problemas.
