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Gandia debate entre fijar fecha en septiembre o aplazar las fallas para 2022

Sanitat rechaza la propuesta de la capital de la Safor y otras ciudades de celebrarlas en julio

Un grupo de personas observa una falla en el cruce entre la calle Major y el paseo de les Germanies de Gandia. | XIMO FERRI

No habrá excepciones para nadie. La Conselleria de Sanitat Universal i Salut Pública, que dirige Ana Barceló, no autorizó a Gandia ni a ninguna otra ciudad que se puedan celebrar las fiestas pendientes desde el 2020 antes del próximo mes de septiembre. La capital de la Safor lo intentó hasta el último momento, y junto con otros municipios como Borriana, Sagunt o Alzira, llegó a solicitar una excepción para poder organizar las actividades a finales de junio o principios de julio.

La decisión ha caído como un jarro de agua fría pero desde la Federació de Falles de Gandia son conscientes de que no queda otra que resignarse y por eso ya se trabaja en una alternativa.

Anoche hubo una reunión con los presidentes de todas las comisiones de la ciudad. Fue un encuentro en el que, además de informar el cómo, también se pusieron sobre la mesa diferentes opciones para elegir el cuándo.

Descartado ya definitivamente julio, hay varias alternativas que ahora deberá estudiar cada falla para tomar una decisión conjunta. La primera es celebrarlas al mismo tiempo que València, es decir, del 1 al 5 de septiembre, con tres días fuertes de actividades, una «cremà» y organizando todo lo que se permita en ese momento dependiendo de la situación pandémica.

La segunda de las opciones pasa por buscar otra fecha diferente a la que ha fijado la capital autonómica para la celebración de las fallas. En ese aspecto, desde la Federació de Falles lo ven complicado. En primer lugar porque llevarlas más allá de octubre provocaría que se juntaría con la preparación del ejercicio siguiente, el 2022, en el que se espera que todo regrese a la máxima normalidad posible. Los plazos serían muy ajustados y, además, se daría el caso de que los monumentos de uno y otro ejercicio arderían con muy poco tiempo de diferencia. Por otro lado, celebrarlas a mediados de septiembre implicaría que prácticamente se unirían a la Fira i Festes, lo que provocaría muchos días sin clase de los más pequeños.

Pero existe una tercera opción, y es la de anular definitivamente las fallas del 2020 y ya fijar como objetivo el 2022. El presidente de la Federació de Falles, Telmo Gadea, reconoce que es la opción que menos le gusta porque siempre ha creído que había que dar por finiquitado el ejercicio 2021, aunque sea celebrando unas fiestas tan atípicas como las que se esperan.

En todo caso, son las comisiones falleras las que deben decidir a partir de las propuestas que anoche se pusieron sobre la mesa. Se hará lo que elija la mayoría en unas semanas. El cómo lo marca Conselleria de Sanitat y dependerá de las restricciones que haya en el momento.

Las fechas que decidió Tavernes

En todo caso, la celebración de las fallas en esas fechas de septiembre no es una obligación. Es a partir de ese momento cuando los ayuntamientos y las juntas locales podrán fijarlas. En la Safor, sin embargo, hay un municipio que se adelantó y ya el pasado mes de febrero decidió que llevaría sus festejos precisamente a esos cinco días, del 1 al 5 de septiembre. Se trata de Tavernes de la Valldigna, cuya Federació de Falles se arriesgó, cuando ni siquiera se planteaba el tema y a sabiendas de que, llegado el momento, podían incluso suspenderse.

En lo que respecta a Oliva, el presidente de la Federació de Falles, Santiago García, explicó que será la próxima semana cuando se reunirán las fallas de la ciudad para tratar esta cuestión y decidir la fecha para la celebración de las fiestas. Xeraco, por su parte, se adaptará a las condiciones que marque la Conselleria de Sanitat. El ayuntamiento consensuará el asunto con las comisiones.

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