Esta mayor alegría en el turismo y la economía también supone un respiro para la hostelería de la playa de Gandia, tras meses de incertidumbre. Aunque sigue la restricción de cerrar a las 23.30 horas, algo que también afecta a los chiringuitos, los bares y restaurantes han notado la llegada de turistas este fin de semana. Los empresarios hosteleros vuelven a llamar a trabajadores para hacer horas extra. Así lo confirma José Navarro, presidente de DestíSafor, la asociación comarcal de hosteleros, tomando como referencia su propio restaurante, Casa José Obélix. «Estamos completos el viernes, hoy (por ayer) y el domingo, sobre todo comidas, el teléfono no para de sonar».

También ayer hicieron buena caja los establecimientos del centro de Gandia. Plazas como la del Prado se llenaron de gente para tomarse un aperitivo. Desde e l recinto ferial salieron los coches del Rally Ciutat de Gandia, cosa que atrajo a numerosos visitantes. Por otra parte, los hosteleros presentaron el proyecto «Tasta Gandia», que coordinará el chef Manuel Alonso y que pretende relanzar la oferta gastronómica local de calidad.