Andrea Márquez, alumna del Máster Universitario en Evaluación y Seguimiento Ambiental de Ecosistemas Marinos y Costeros del Campus de Gandia de la Universitat Politècnica de València (UPV), ha sido galardonada con el primer premio en la cuarta edición de los Premios del Colegio Profesional de Ciencias Ambientales de la Comunitat Valenciana (CoAmbCV).

Márquez asegura que el premio a su trabajo, «Sostenibilidad del sector pesquero en la Comunitat Valenciana: el reto del relevo generacional» , es «un reconocimiento a la investigación detrás de los resultados numéricos y las entrevistas, también a la problemática que tratamos de visibilizar y explicar».

En el trabajo, tutorizado por la profesora Paloma Herrera, se aborda una amenaza que pone en peligro a las pesquerías a pequeña escala: el relevo generacional.

La falta de relevo generacional, de jóvenes cualificados en el sector primario, no es exclusivo de la pesca. Sin embargo, Márquez afirma que «las políticas pesqueras se han centrado en problemas ambientales y económicos, lo que ha contribuido a la falta de conocimientos y estudios sobre el relevo generacional y a la ausencia de mecanismos de inserción laboral para afrontar este reto».

Los datos estiman que para el año 2025 habrá un descenso del 35% en el número de tripulantes y del 31% de embarcaciones respecto al 2019.

Para esta investigación, se ha contado con las aportaciones de las principales cofradías pesqueras de los puertos de Benicarló, Cullera, Dénia, Gandia, Sagunt y Xàbia.

Todas ellas sostienen que, además de los problemas estructurales que aumentan la inestabilidad económica del sector, «la presencia de turistas cada vez mayor en los municipios del litoral, el acceso descontrolado de barcas recreativas y la pesca deportiva interfieren directamente en el desempeño de aquellas labores pesqueras que tienen lugar en las zonas más próximas a la costa». Ante esta situación, «los pescadores se sienten abandonados y poco valorados por la Administración».

Otros obstáculos para el sector pesquero, y que se tratan en el estudio de la alumna del campus de Gandia, son el establecimiento obligatorio de cursos de formación para permitir el embarque, el carácter paterno-familiar de la actividad, la masculinización o las preferencias de las nuevas generaciones por otros oficios.

El trabajo de Márquez ha reunido también una serie de estrategias que permitirían recuperar el equilibrio estructural y alcanzar la sostenibilidad. Para la estudiante, las medidas adoptadas por la Unión Europea no han conseguido aumentar el atractivo de la actividad a fin de captar a las generaciones más jóvenes.

Por ello, propone la creación de una forma apropiada de cooperativismo, establecer bonificaciones salariales, realizar campañas de información y campañas específicas para hosteleros y colegios con el objeto de fomentar el consumo de pescado y marisco fresco, así como, campañas de visibilización del trabajo de la mujer en la pesca o incorporar el oficio de pescador en la Formación Profesional.