Los municipios de la Safor siguen recuperándose del «reventón térmico» sufrido la semana pasada. Aunque la caída de la noria de la playa de Gandia acaparó todas las miradas, otros pueblos de la comarca, como es el caso de Almiserà, también sufrieron daños materiales.
En Almiserà la tormenta seca propició la caída de varios arboles en la Urbanizació de Montevernissa. La alcaldesa del municipio, María Teresa Pedro Melis, explicó en Levante-EMV que «dos árboles cayeron en el camino de la urbanización, otro en un chalet y un otro árbol que acabó encima de un coche».
Desde el ayuntamiento han agradecido la colaboración de los vecinos y vecinas del municipio y el trabajo de los bomberos de Gandia, quienes «se encargaron de retirar los arboles del camino». El resto de labores se llevaron a cabo por técnicos del ayuntamiento.
Por suerte, y como confirmó la alcaldesa Pedro, solo se sufrieron daños materiales y no hubo que lamentar ningún herido.