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Una solución intermedia en la CV-60

El concepto es el mismo que sigue vigente en la mayor parte de esa carretera

La CV-60, en forma de autovía de cuatro carriles, a su paso por Llocnou de Sant Jeroni. | PERALES IBORRA

La posición del Ayuntamiento de Gandia sobre la prolongación de la CV-60 entre este municipio y Palma de Gandia es a favor de la obra, pero aplicando una serie de modificaciones para minimizar el impacto visual y garantizar su completa efectividad. No solo lo aprobó el pleno, con el voto a favor de 21 concejales, todos excepto los 4 de Compromís Més Gandia Unida, sino que ayer el Gobierno local, reunido en sesión extraordinaria, reiteró su respaldo a la obra.

Pero no fue por acuerdo. De los dos grupos del Gobierno, los socialistas, con cinco representantes, incluyendo al alcalde, José Manuel Prieto, votaron a favor de las alegaciones que dan su apoyo a la autovía diseñada por la Generalitat. En frente, y con una «discrepancia pactada» que no tendrá consecuencias políticas, los concejales de Compromís Més Gandia Unida, con el vicealcalde Josep Alandete al frente, que votaron en contra del pliego de alegaciones porque lo que quieren es la retirada del proyecto por parte de la Generalitat.

Dos aspectos llamaron la atención ayer. Por una parte, que la discrepancia también se «representara» en el seno de Compromís, dado que asistieron solo dos de sus concejales, Alandete y Nahuel González, mientras que otros dos, Alícia Izquierdo y Ferran Martínez, optaron por no acudir a la reunión. Son, precisamente, quienes se han caracterizado por defender una posición más favorable a la necesidad de ejecutar el proyecto de la Generalitat y cerrar la CV-60, conectarla con la AP-7 y la N-332 en el entorno de Gandia.

La otra cuestión a tener en cuenta es el cambio de criterio de los dos concejales que ahora rechazan el proyecto. Porque Alandete y Nahuel González votaron a favor de la CV-60, como la había diseñado la Generalitat, hace apenas unos meses. En aquel momento pidieron minimizar el impacto visual, pero el texto que remitieron a la Generalitat señalaba que la obra era «necesaria y urgente». El giro registrado se debe a la posición de sus respectivos partidos, Compromís en el caso de Alandete y Esquerra Unida en el de González, que en las últimas semanas han pedido al conseller de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad, Arcadi España, que anule esta actuación y estudie una infraestructura con el mínimo impacto ambiental y sobre el territorio que traviesa.

De la larga relación de alegaciones que los ayuntamientos de la Safor han presentado al proyecto de prolongación de la autovía CV-60, entre Palma de Gandia y Gandia, sin duda destaca la idea planteada por el de la Font d’en Carròs, que bien podría definirse como una solución intermedia entre los partidarios de que esa obra no se haga y entre quienes consideran que es necesaria y fundamental para el desarrollo económico de la Safor y del conjunto de las Comarcas Centrales Valencianas.

En su escrito de alegaciones, el alcalde de la Font, Pablo Puig, no se opone al proyecto, pero sí plantea a la Conselleria de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad que haga una reflexión y estudie si sería viable, al menos en una primera fase, construir la carretera en dos carriles, y no en cuatro como está proyectada, lo que reduciría considerablemente su impacto sobre el territorio.

Dice el alcalde fontero, socialista y con mayoría absoluta en la corporación, que la autovía CV-60, que en su día se denominó «del Morquí», fue concebida hace veinte años, en plena época de expansión urbanística y con perspectivas de crecimiento demográfico y económico que hoy han quedado muy desfasados. Puig explicó a este periódico que ahora la previsión de crecimiento es mucho más baja y que por eso plantea a la Generalitat que, al menos, tenga en cuenta y estudie esa alternativa.

Construir carretera convencional, de dos carriles, en vez de autovía supondría un enorme ahorro para la Generalitat. En primer lugar porque el tramo entre Palma de Gandia y Beniflà ya estaría hecho, y después porque la ocupación de suelo y el levantamiento de la plataforma sobre la que circularán los vehículos es prácticamente la mitad que la prevista en el trazado a cuatro carriles.

El alcalde plantea que cuando esa carretera esté operativa ya se podría estudiar, con datos sobre tráfico, si es necesario ampliarla. Justamente eso es lo que se hizo en todo el trazado de la autovía CV-60, excepto el tramo que va de Palma de Gandia a Terrateig, y hasta el momento no se detectan colapsos en la circulación.

«Todos los alcaldes estamos reduciendo los crecimientos previstos, y tampoco es ninguna barbaridad que ahora la Generalitat, con este proyecto, estudie hacer lo mismo», concluye Pablo Puig.

La aportación de esta idea al debate suscitado en la Safor sobre la prolongación de la CV-60 contrasta con posiciones de aprobación o rechazo absoluto al proyecto, e incluso a un cierto galimatías a la hora de plantear las ideas de cada consistorio a la Generalitat.

Así, y según ha podido comprobar este periódico, entre los ayuntamientos con sus términos afectados están a favor de la obra los de Palma de Gandia, Beniflà, Beniarjó y Gandia. Almoines ha remitido a la Conselleria de Obras Públicas la alegación de Compromís, que pide la retirada del proyecto y aprovechar las actuales carreteras para dar salida al tráfico de la CV-60, pero también otra en la que pide modificaciones dirigidas a reducir el impacto en el caso de que la Generalitat opte por seguir adelante con la infraestructura proyectada. Rafelcofer, Potries y Ròtova han enviado la alegación de Compromís, contraria a la obra, y Bellreguard también la remitió, pero junto a otras dos mociones, una a favor y otra en contra, aprobadas en el pleno.

Entre las formaciones políticas, y de forma genérica, PSPV-PSOE, PP y Ciudadanos están a favor del proyecto de la Generalitat, mientras que Compromís, Podemos y Esquerra Unida, entre otros colectivos, rechazan esta actuación.

Gandia, a favor con el sí del PSOE y el no, a medias, de Compromís

El Gobierno local muestra la «discrepancia pactada» entre los dos grupos sin consecuencias políticas

s.s. gandia

66 millones del Consell y silencio de la Mancomunitat

La prolongación de la CV-60 entre Palma de Gandia y Gandia supondría la inversión de unos 66 millones de euros que aportarían la Generalitat y, previsiblemente, también la Administración del Estado. El proyecto, que el Consell quiere impulsar para su ejecución en el menor tiempo posible, se ha debatido ampliamente en los municipios de la Safor afectados, en los partidos políticos y en colectivos, pero, significativamente, no ha llegado a plantearse en la Mancomunitat.

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