Una impresionante tromba de agua sorprendió a primera hora de la tarde el área central de la comarca de la Safor, pero fue en la capital, Gandia, donde alcanzó la máxima virulencia y dejó la mayor precipitación acumulada.
Según datos registrados por las estaciones meteorológicas automáticas conectadas al sistema de Avamet, en poco más de una hora se recogieron en la zona de l’Escola Pia 24 litros por metro cuadrado, cifra algo superior a la que se midió en el pluviómetro situado en el ayuntamiento. En ambos casos, en pleno centro de la ciudad. En numerosas terrazas, donde algunas personas comían a esa hora, tuvieron que ponerse precipitadamente a refugio. La intensidad de la lluvia hizo temer por momentos que los sistemas de evacuación quedaran desbordados, pero una vez más la extensa red de colectores de alta capacidad que se han ejecutado en Gandia envió el caudal al cauce del Serpis.
En otros puntos de la comarca la precipitación, aun siendo intensa, no alcanzó esos niveles. En Barx se midieron entre diez y quince litros por metro cuadrado. Quince también en el área de l’Ermita de Marxuquera.
Las lluvias ni siquiera sumaron los cinco litros en el norte y sur de la Safor, pero sí que fueron muy importantes en la zona limítrofe de la Vall d’Albaida, con más de treinta litros por metro cuadrado en distintos pluviómetros situados entre los municipios de Castelló de Rugat y Llutxent, que drenan directamente al río Vernissa.
La tempestad, acompañada de aparato eléctrico, también generó un brusco descenso de las temperaturas que, desde primera hora de la tarde, quedaron por debajo de los 22 grados.
