Un matrimonio de Oliva encontró el pasado miércoles a dos pequeños cachorros de perro en un contenedor de basura de la ciudad. Los animales se encontraban dentro de una bolsa de plástico, por lo que es un milagro que aún estuvieran vivos cuando fueron hallados. Según explica la mujer en redes sociales, fue su marido quien les escuchó llorar mientras transitaba junto al contenedor y, tras rebuscar en la basura acabó dando con los dos pequeños perritos.
La pareja les trasladó a las instalaciones de Vedama, la protectora de animales de Oliva. Una representante de la entidad, María José Fuster, ha explicado a este periódico que los dos cachorros deben tener "unos dos o tres días" y que se encuentran "en buen estado". Fuster cree que fueron lanzados al contenedor muy poco antes de ser encontrados "en primer lugar porque los contenedores se vacían todos los días" pero también "porque si hubieran llevado mucho tiempo habrían fallecido ahogados" en las bolsas de plástico.
De momento se desconoce de qué raza son y han sido trasladados a una casa de acogida. La mujer asegura que hechos de este tipo se producen "muy a menudo" y que en ocasiones los encuentras ya cadáver. También asegura que no presentan denuncia "porque nadie hace caso de nada", indicaba.
