Un clima agradable durante gran parte del año, estar al lado de la playa, buena gastronomía y una gran cantidad de espacios culturales y de ocio. Es, no cabe duda, un entorno inmejorable para trabajar y en esa descripción es fácil enmarcar a la ciudad de Gandia. La pandemia del coronavirus ha impulsado de forma muy importante el teletrabajo, es decir, la posibilidad de desarrollar la labor diaria en una empresa sin necesidad de estar presencialmente en la oficina.
Esta circunstancia ha sido aprovechada por muchas personas para viajar durante gran parte del año o bien cambiar de aires y rodearse de un entorno muy distinto al que estaban acostumbrados para combinar su trabajo con un lugar que le permita estar más alejado de situaciones que generan mayor estrés como son las aglomeraciones, el tráfico, las colas para cualquier cosa o incluso la lluvia y el frío periódicos.
Un estudio elaborado por el portal de alquiler vacacional Airbnb ha situado a la ciudad de Gandia como una de las más «hospitalarias» de toda España. Este ranking se basa en los comentarios que realizan los clientes que alquilan viviendas para largas estancias y que, en muchos casos, acuden a teletrabajar.
La capital de la comarca de la Safor comparte la lista con otras urbes de tamaño medio como son Oviedo (Asturias), Lloret de Mar (Cataluña), Arrecife y La Laguna (Canarias) o Cádiz.
La plataforma analiza no solo el precio de los pisos, sino que tiene en cuenta la combinación de los beneficios que puede ofrecer más allá de las horas laborales una ciudad como Gandia respecto a una ciudad más grande. Son cuestiones como la cultura, gastronomía, entretenimiento e historia, además un ritmo de vida más calmado.
El atractivo que tiene Gandia más allá del evidente, pasa, además, por ofrecer una gran cantidad de servicios y facilidades a las personas que están acostumbradas a tenerlo todo al alcance de la mano prácticamente. En la capital de la Safor se pueden encontrar prácticamente los mismos servicios que en cualquier gran ciudad española pero, además, en un entorno mucho más tranquilo que, por ejemplo, en Madrid o Barcelona.
Esta tendencia de ir en busca de zonas más amables y tranquilas para teletrabajar es la que también hace que se alargue la temporada de verano y que muchas personas que acuden a pasar sus vacaciones a municipios costeros de la comarca de la Safor estiren los días mientras dura el buen tiempo, que en muchos casos es bien entrado el mes de octubre. También se ha incrementado el número de familias que directamente trasladan su domicilio a las playas todo el año.
