Los albergues de las protectoras de animales están a tope este verano. Sólo en Gandia la adjudicataria del servicio, Spama, ya ha recogido entre enero y julio de este año 249 animales abandonados o extraviados, de los cuales 152 gatos y 91 perros, además de un caballo y 5 aves.
En Tavernes la entidad que presta este servicio es la Associació Animalista. Tienen una parcela yendo a la playa, aunque todavía no dispone de la certificación de núcleo zoológico. Disponen de diez casetas, que están llenas, aunque siempre deben dejar una libre por si aparece algún animal de urgencia. Actualmente hay 12 perros y 32 gatos.
En Oliva la protectora Vedama tiene el refugio en la antigua perrera, en la carretera hacia Forna. El verano pasado no hubo más de 20 perros y este ya tienen a 40. Además hay varias camadas y perras embarazadas, hay 14 cachorros.
La presidenta de Vedama, María José Fuster, observa que las nuevas entradas son de perros jóvenes. Sospecha que no sólo influye el verano, también la pandemia: «Pensamos que hay personas que el confinamiento les llevó a tener un perro, pero dos años después ya se han cansado, y, o bien lo están abandonando, o nos dicen que si nos podemos hacer cargo». Además, ahora las adopciones se frenan porque mucha gente está de vacaciones.
Para todas estas entidades animalistas las redes sociales, especialmente Facebook, son canales de comunicación fundalmentales, ya que les permite sensibilizar y hacer llamamientos para acogidas o adopciones, algunas de ellas incluso de carácter internacional.
