Aliou Seye, el joven operario que se precipitó mientras trabajaba en las obras de construcción del futuro Palacio de Justicia de Gandia, ha fallecido tras varios días ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital La Fe de València, a donde fue llevado, en helicóptero, inmediatamente después de sufrir el percance.

Aliou Seye, de 34 años, cayó, por causas que se están investigando, desde una altura aproximada de diez metros y sufrió un brutal impacto en la cabeza con el resultado de traumatismo craneoencefálico severo con consecuencias que ya se presumían fatales desde un primer momento. Pese a los esfuerzos que durante más de una hora le realizó personal sanitario en el mismo lugar del accidente y a las posteriores intervenciones que se le practicaron en el hospital La Fe, acabó falleciendo.

Como es preceptivo en estos casos, la investigación sigue abierta para determinar por qué motivos se produjo el accidente laboral, ocurrido alrededor del mediodía del pasado 8 de agosto.

El joven fallecido residía entre Gandia y Llutxent, localidad de la Vall d’Albaida en la que había echado raíces. El cuerpo, por expreso deseo de la familia, ha sido repatriado a su país de origen.

Numerosas personas han expresado sus condolencias por el fatal desenlace de un accidente laboral que también generó el lamento de responsables políticos de la ciudad de Gandia y el deseo de que lograra superar las gravísimas heridas que sufrió.

El nuevo Palacio de Justicia de Gandia se construye en el ensanche del distrito de Santa Anna, y constituye uno de los proyectos más emblemáticos de esta legislatura. Debido al accidente las obras quedaron paralizadas, pero poco después se han retomado y siguen con normalidad.