El consejo de administración de la Autoridad Portuaria de València (APV) autorizó este viernes al Real Club Náutico de Gandia seguir ocupando el espacio situado entre el paseo marítimo y la dársena del puerto para que pueda seguir realizando actividades sociales y deportivas.

El acuerdo tiene un plazo máximo de un año, pero esa autorización decaería si antes de ese periodo se produce una resolución judicial que obligue a ello. Porque, como señaló el director de la APV, Francesc Sánchez, todo está pendiente del larguísimo enfrentamiento que mantienen en los tribunales tanto la APV como el Náutico y la empresa Alcara Infraestructuras a cuenta de la concesión administrativa que entregará esa privilegiada zona de la playa gandiense al club o a la empresa.

La decisión de la APV supone, en buena medida, un reconocimiento a que el problema va para largo, algo que lamenta el Ayuntamiento de Gandia que hubiese deseado una tramitación «normal» de la concesión administrativa iniciada hace más de cinco años. De haber sido así hoy ya estaría construido y abierto el nuevo complejo previsto en la zona.

Tras el acuerdo de la APV Francesc Sánchez reiteró en varias ocasiones que el acuerdo para que el Náutico siga en ese lugar es exclusivamente «mientras se resuelve el conflicto judicial».

Alcara Infraestructuras considera que, a la luz de las sentencias ya emitidas, la APV debería seguir un procedimiento administrativo iniciado hace mucho que acabaría por entregarle el derecho al uso de ese espacio portuario durante los próximos 25 años. Pero la APV, lejos de cerrar el capítulo, entiende que aún queda recorrido judicial y que mientras no haya una resolución firme esperará.