El Palau Ducal dels Borja de Gandia ha inicia los trabajos de restauración de la fachada oeste del Patio de Cañas, un bello espacio del edificio que, en los últimos años, ha servido para acoger muchos actos públicos. «A pesar de ser una de las partes más desconocidas del Palau, el Patio de Cañas es clave en su historia y evolución a lo largo del tiempo. Se sitúa junto a la primigenia torre vigía de época islámica y formó parte de la antigua Plaza de Armas del primitivo palacio fortificado donde se localizaban la armería y el polvorín», ha señalado la dirección del Palau.

A la llegada de los Borja, el patio se convirtió en una zona ajardinada en la que recaían las dependencias privadas de los duques. En el siglo XVI el V duque de Gandia, Carlos de Borja, mandó construir la gran cisterna que todavía se conserva, pasando a llamarse Patio de la Cisterna. Con la adquisición del Palau por parte de la Compañía de Jesús, a finales del siglo XIX, esta parte se transformó para acoger las celdas y demás dependencias del colegio Borja-Jesuitas, que mantiene la actividad ahora en régimen de concertación con la Conselleria de Educación, mientras que en el patio introdujeron las cañas de bambú que hoy en día le dan nombre y que en varios espacios producen sombra, lo que permite acoger actos incluso en meses de más calor. En la imagen, difundida por la gerencia del Palau, el andamio que se ha instalado para llevar a cabo la obra.