Rafael, el indigente que durante los últimos meses ha vivido en la esquina de las calles Sant Rafael y 9 d’Octubre de Gandia, finalmente se ha dejado ayudar y ha decidido trasladarse, al menos para dormir, al Centreo de Atención Integral de Cáritas, en la carretera del Grau.
El hombre, que levantaba algunas quejas por la absoluta falta de higiene en la que vivía, fue atendido por un equipo de los Servicios Sociales municipales, y también por Cáritas y agentes de la Policía Local que en estas frías noches y madrugadas han estado al tanto para que, al menos, dispusiera de ropa de abrigo, mantas y comida y bebida caliente.
Según ha podido saber este periódico, el ayuntamiento está tratando de que la autoridad judicial autorice a que sea llevado a algún centro asistencial, probablemente el hogar de acogida Sant Francesc d’Assís de Palma de Gandia, porque hay temor de que pueda morir en la calle sin ninguna ayuda.
Cuando salió de su cobijo callejero la propiedad del inmueble situó una reja que ahora ya impediría montar su «casa» a cobijo del viento y de la lluvia.
