Oliva vuelve a representar la Passió en valenciano

El acto, este domingo, cambia de horario para realzar la escenografía

Un momento de la Passió d'Oliva, en una edición anterior

Un momento de la Passió d'Oliva, en una edición anterior / Levante-EMV

Miquel Font

Tras el parón de cuatro años por la pandemia de la covid-19 y otras circunstancias, Oliva recupera este domingo día 26 de marzo la octava representación de la Passió d’Oliva en la montaña de Santa Anna con algunas novedades respecto a las anteriores ediciones de la celebración. Organiza la Associació Cultural La Passió d’Oliva junto al departamento de Cultura del Ayuntamiento de Oliva. El bello y antiguo Calvario olivense será el marco extraordinario para las escenas más importantes de esta Pasión que cada año recibe más visitantes foráneos y que escenifica los últimos momentos de la vida de Jesucristo. La obra se desarrolla en valenciano.

Desde las 19 horas de este domingo, en la Plaça de Sant Roc, arrancará el acto con el tradicional Juicio de Herodes al que llegarán todos los participantes juntos en desfile desde las Escola Pública Santa Anna a toque de tambor. Colabora un año más la Centuria Romana “Ultima Legió Hispaniae” de Pego.

De nuevo será David Capellino quien encarnará a Jesús de Nazaret, mientras que su madre Conchín Vallés será la Virgen María en una representación dirigida un año más por Mónica Castillo. Miguel Ángel Pérez volverá a ser Poncio Pilato y Diego Sánchez Abenader, mientras que María Magdalena volverá a ser Ana Jordá.

Este año como novedad los ladrones crucificados serán Alex Palomares y Juanjo Sanchis, mientras que se ha intentado cuidar mucho al público que está en el juicio que serán actores aficionados al teatro en su mayoría.

Para esta edición se espera poder llevar a cabo una ambientación especial con la música por los altavoces y los efectos especiales de luces, ya que se ha buscado un horario más tarde-noche para que se puedan ver mejor.

Otra novedad es que la segunda caída será más arriba en el calvario, en una zona más amplia para que pueda ser contemplada por los asistentes al acto, puesto que donde se hacía antes quedaba muy estrecho para el público. Año tras año van mejorando el vestuario y todos los detalles de la representación que concluirá, como en las últimas ediciones con la resurrección de Jesús tras la bella estampa de la Piedad, que es una de las más esperadas de la noche.

Esa representación nació en el año 2011 de la mano del propio David Capellino, que encarnaba desde pequeño al Nazareno viviente en la hermandad del mismo nombre. En el año 2018 la representación tuvo que anularse por enfermedad del propio actor principal. Otro año se anuló finalmente por la lluvia el día de la celebración y las dos que no se han hecho por la pandemia, por lo tanto son cuatro las ediciones suspendidas.