El CF Gandia o la crisis de nunca acabar

El CF Gandia atraviesa por una nueva crisis. Si el 30 de junio no ha liquidado una deuda de 200.000 euros que tiene contraída con jugadores y técnicos, podría descender administrativamente y se le suspenderían las licencias federativas.

La situación se agrava por la falta de comunicación de los gestores del club. La empresa que lleva la gestión, que representa Líbero Parri, y la directiva institucional, con Jesús Sendra y José Luis Gomar la cabeza, están a la greña.

Cuando parecía que la resurrección del club era una realidad con el retorno del primer equipo a categoría nacional al final de la pasada temporada, se vuelve a las andadas.

Los propios Sendra y Gomar convocaron este jueves en Fomento una reunión informativa para intentar explicar la más que delicada situación que vive ahora mismo el CF Gandia. A la misma asistieron unas 70 personas, incluido Líbero Parri, y hasta futbolistas y entrenadores.

De la reunión se desprende la nula comunicación entre las dos partes representantes de la entidad ante la perplejidad de los socios, aficionados, deportistas y técnicos, que contemplan atónitos el panorama. 

Líbero Parri, invitado a subir a la mesa presidencial de la reunión por parte de Jesús Sendra, explicó que confía en poder tener solucionada y pagada la deuda antes del 30 de junio.

Por su parte, desde la directiva buscan otras opciones para salvar la situación, reconociendo contactos con otro grupo inversor dispuesto a hacerse cargo de la deuda, pero para ello solicitan los números al equipo de gestión.

Cada parte expuso sus argumentos, dejando de manifiesto sus discrepancias. La deuda que tenía el CF Gandia con Vicente Escolano es uno de los detonantes de la crisis. Parri tiene sus razones que, sin embargo, no le valen a Sendra y a Gomar. 

Los asistentes a la reunión solicitaron diálogo y unión entre las partes para dar con la solución al problema que tiene fecha de caducidad. 

Están obligados a entenderse. O Libero Parri y su empresa intentan conseguir la financiación necesaria para saldar la deuda que tiene ahora mismo el club o se podría producir la entrada en el club de un nuevo inversor que esta dispuesto a hacer frente a la deuda.  La duda también reside en si podrían convivir los dos grupos inversores o solamente quedar uno.