Espaldas con varias hernias discales que son un arpegio continuo de dolor, piernas que con solo apoyar los pies en el suelo despiertan un sufrimiento que solo se ha silenciado durante la noche, migrañas que obligan a quien las padece a echar el cierre en su mundo personal, procesos degenerativos que flirtean con el padecimiento, fibromialgias que encorsetan cuerpos llenos de juventud, enfermos oncológicos que sufren por capricho del Fatum... más de cuatro semanas de dolor crónico es inaceptable, inadecuado e inhumano por la importante merma de la calidad de vida que supone.

Lo afirma el responsable de la Unidad del Dolor del hospital General de Valencia, José de Andrés, que también es el jefe de servicio de Anestesia y Reanimación, otras dos grandes áreas que lo único que persiguen es que el ser humano sufra lo menos posible en esta vida.

El especialista es partidario de prevenir el dolor. Por el elemental ahorro de sufrimiento para el paciente y por el indiscutible ahorro que supone para el escuálido sistema sanitario.

"Hay procesos que se cronifican, y cirugías de amputación de piernas, mastectomías (mama), colecistectomía (vesícula), hernias inguinales... que por el tipo de corte y lesión si no haces muy buena prevención del dolor, se pueden cronificar, pasar al ganglio de la raiz dorsal (alineados en el canal de la médula ósea) y crear una sensibilización nerviosa que llega al cerebro y hace que el dolor se cronifique ", explica el doctor de Andrés, que destaca que lo "importante" es bloquear y confinar la señal de dolor en la periferia del miembro o zona afectada para que no cruce la barrera nerviosa del ganglio (la médula ósea) y los axones nerviosos que salen por las articulaciones, responsables, en definitiva de los calvarios que se prolongan durante años.

En la Unidad del Dolor del hospital General de Valencia, que es de referencia en la Comunitat Valenciana, disponen de técnicas muy eficaces para erradicar lumbalgias y cervicalgias que hacen rabiar a quien las padece, cuadros de fibromialgia, cefaleas, neuropatías periféricas, procesos oncológicos, artrosis degenerativas de cadera, columna, rodilla... Cada enfermo requiere un tratamiento personalizado.

Neuromodulación

Una de las herramientas es la neuromodulación con electrodos, "un avance en el control del dolor", precisa De Andrés. La técnica consiste en hacer una estimulación medular o bien para infundir los analgésicos que el paciente requiere para tratar procesos de dolor muy complejos. Este procedimiento requiere colocar una batería debajo de la piel que, en realidad, es un ordenador.

La neuromodulación produce una vasodilatación que corrige el dolor desde su origen. Esta técnica se puede aplicar a pacientes con dolor neuropático de las raices nerviosas y dolor isquémico, herpes zorster, amputaciones...

"Cuando un nervio no funciona es que está relacionado con la neuromodulación nerviosa", agrega el experto, que indica que es un procedimiento muy valioso para personas con la amenaza de la apuntación, porque puede evitarse.

"Los costes del tratamiento son relativos porque aunque sean altos (la batería cuesta 12.000 euros), se evitan otros como la cirugía de amputación, la hospitalización, la prótesis, la rehabilitación, la incapacidad laboral, el trauma psicológico del paciente que es incuantificable y, en definitiva, es una indudable mejora en la calidad de vida", expresa el responsable de la Unidad.

"El dolor es individual, no es un elemento constante", precisa De Andrés, partidario de tratar a los pacientes en fase temprana porque en la Unidad del Dolor se persiguen dos fines: diagnosticar el dolor y localizar su origen, y tratarlo.

Los profesionales que trabajan en este servicio atendieron el año pasado a 8.000 pacientes (900 de primeras consultas y 7.000 de sucesivas), mil más que el año anterior que vieron alrededor de siete mil (1.100 de primeras consultas y 6.000 de sucesivas).

Otra de las técnicas que se utilizan es la radiofrecuencia o electroacupuntura, que es la técnica más extendida en la que el profesional bloquea el origen del dolor al aplicar una descarga eléctrica con una aguja en la articulación afectada por el axón nervioso que lo transmite al cerebro.

Como curiosidad destacar que los profesionales utilizan un producto denominado "ziconotide", que es un veneno que produce el caracol marino muy eficaz contra el dolor porque bloquea los canales de calcio, por donde se trasmite la señal dolorosa.

El dolor también es sexista, ya que afecta a más mujeres que hombre (en una relación de 60-40). El hecho de que haya más pacientes mujeres se justifica porque tienen más patología ósea degenerativa y están en la diana del síndrome de fibromialgia

En este sentido, el doctor José de Andrés afirma que aunque se desconoce su origen todo apunta a dos factores: el reumatismo y el conductual o psicológico. En estos momentos, los especialistas abordan el tratamiento de esta enfermedad con técnicas de imagen funcional para ver qué centros cerebrales se han activado con el dolor que justifiquen, además, la sintomatología que el paciente relata.

"Hay que transmitir que una unidad del dolor no es competencia de otro especialista y que solo vamos a ayudar al paciente que es el que se merece toda nuestra atención", agrega.

En cuanto a los dolores de espalda por traumatismos, aplastamientos por osteoporosis o por metástasis, el especialista refiere que en ocasiones más que antiinflamatorios, lo que se requiere es "hacer un refuerzo vertebral para estabilizar la columna; es la manera de ir al origen y resolver la lesión".

Lo más importante de todo es que los ciudadanos con dolor sepan que no hay que esperar meses o años para tratarse y volver a sonreír con plenitud.