El Instituto de Investigación Sanitaria Incliva, del Hospital Clínico de València, ha analizado el potencial de los microARN -pequeñas moléculas de ARN implicadas en la regulación de la expresión génica y presentes en determinados fluidos extracelulares- como biomarcadores de osteoporosis y artrosis, un estudio que podría contribuir al futuro diagnóstico en etapa temprana. El estudio apunta en concreto al miR-497 circulante como biomarcador significativo de coxartrosis (artrosis de cadera), según un comunicado de la entidad, que recuerda que el 20 de octubre se conmemora el Día Mundial de la Osteoporosis

El trabajo tiene como investigador principal al doctor Miguel Ángel García Pérez, profesor titular del Departamento de Genética de la Facultad de Ciencias Biológicas de la Universitat de València (UV) y coordinador del Grupo de Investigación en Genética de la Osteoporosis de Incliva.

Sus resultados han sido presentados en el 2021 World Congress on Osteoporosis y publicados en el último número de la revista Scientific Reports. Uno los principales objetivos de este investigador es la búsqueda de biomarcadores genéticos y séricos, principalmente en la osteoporosis postmenopáusica, según las mismas fuentes.

En la investigación se ha contado con la intervención del doctor Damián Mifsut -del mismo Grupo de Investigación y jefe de sección del Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología del Hospital Clínico de Valencia-, el doctor Antonio Cano -jefe del servicio de Ginecologíía y Obstetricia del Clínico- y de Clara Pertusa, investigadora predoctoral del grupo. A pesar de que son patologías de inicio tardío, la osteoporosis y la artrosis muestran una elevada prevalencia en la población debido al aumento en la esperanza de vida, que producen desde dolor hasta deformidad ósea y fracturas, disminuyendo la calidad de vida de quienes las padecen.

Su origen puede deberse tanto a factores genéticos como ambientales y de estilo de vida y su mayor incidencia se encuentra en el grupo de mujeres postmenopáusicas, debido a los cambios en los niveles de hormonas que se producen durante esta etapa. La osteoporosis tiene como principal consecuencia la fractura ósea por fragilidad, debido a la baja masa ósea y deterioro de la microarquitectura del hueso que caracterizan esta enfermedad.

En la actualidad, causa más de 8,9 millones de fracturas cada año en todo el mundo, y su prevalencia está aumentando en paralelo con la creciente esperanza de vida (22 % de las mujeres mayores de 50 años en la UE). Por su parte, la artrosis genera dolor articular y deterioro funcional y puede provocar cambios patológicos como destrucción del cartílago articular, rigidez y formación de osteofitos (espolones óseos). Afecta a más de 40 millones de personas en toda Europa y, con el aumento de la longevidad, se prevé que se convierta en una de las principales causas de discapacidad en todo el mundo.

El objetivo de la investigación era buscar biomarcadores de la osteoporosis y la artrosis, según las fuentes, que indican que los microARNs han mostrado su potencial como biomarcadores en numerosas patologías. El actual estudio partía de otro anterior del mismo grupo en el que se analizaba y comparaba la expresión de 179 microARNs séricos en mujeres que habían sufrido una fractura de cadera osteoporótica y en mujeres sometidas a la implantación de una prótesis de cadera debido a coxartrosis severa.

La investigación actual analiza la utilidad como biomarcadores de osteoporosis y de artrosis de 4 microARNs que en el trabajo previo aparecían diferencialmente expresados entre grupos. Para ello, se midieron mediante PCR cuantitativa y se compararon estadísticamente los niveles de estos 4 microARNs en el suero sanguíneo de un total de 100 mujeres postmenopáusicas, divididas en 3 grupos: control (sin patología ósea), con coxartrosis severa y con fractura de cadera.

El hallazgo más importante del estudio, desarrollado durante cinco meses, muestra que el miR-497 circulante puede representar un biomarcador significativo de coxartrosis, un hallazgo prometedor que podría contribuir al futuro diagnóstico en etapa temprana de esta enfermedad, según las fuentes.