Las caries son, con diferencia, el mayor problema de salud bucodental a nivel mundial. En la actualidad, se estima que afectan a más de 2.300 millones de personas adultas y 530 millones de infantes con dientes de leche. En caso de no tratar este problema de forma adecuada, muchas veces puede provocar la pérdida del diente afectado.
Otras enfermedades con cifras alarmantes son la periodontia grave, cuya incidencia alcanza casi el 10 % de la población mundial, y el cáncer bucal, que ya es el tercer tipo de cáncer más común en la mayoría de países de Asia y el Pacífico.
Importancia de la educación bucodental
La salud de la boca repercute directamente en la calidad de vida de los ciudadanos. Según la OMS, los principales factores de riesgo en la aparición de enfermedades bucodentales son una rutina incorrecta de higiene dental, una mala alimentación y el consumo de tabaco y alcohol.
En este sentido, una mala salud bucodental puede afectar en las enfermedades sistémicas de la persona, de manera que puede derivar en complicaciones durante el embarazo, enfermedades cardiovasculares o favorecer la aparición de la diabetes, entre otros problemas de salud.
Sin embargo, es importante resaltar que la mayoría de los trastornos de salud bucodental son prevenibles y pueden tratarse en sus etapas iniciales. Para ello, es fundamental mantener una correcta higiene dental y visitar de forma periódica al higienista dental.
La odontología es la responsable de proteger su salud bucodental, previniéndole de enfermedades orales. El higienista dental, junto al odontólogo, desarrolla una prevención primaria en los pacientes; es decir, les dan las pautas y hábitos aptos para mantener una correcta salud bucodental y evitar futuras posibles dolencias.
En este punto, los higienistas dentales destacan cinco medidas básicas para mantener una buena salud bucodental: el cepillado dental diario, al menos dos veces al día, siendo la limpieza nocturna la más importante; el limpiador lingual, por ser la lengua un especial lugar de acumulación de bacteria y virus; los enjuagues con colutorios específicos con CPC, que reducen la carga bacteriana y viral; el hilo dental o cepillos interdentales; y la visita periódica a su clínica dental.
“Llame a su clínica dental y pida cita con su higienista dental para que le marque las pautas para tener una sonrisa sana y un cuerpo sano”, aconsejan el Colegio Oficial de Higienistas Dentales de la Comunitat Valenciana.
