Qué pasa en el cuerpo si comes ketchup todos los días

El kétchup es, probablemente, una de las salsas más conocidas y populares del mundo, con permiso de la mayonesa. Se trata de una sabrosa salsa de tomate que sirve de acompañamiento a multitud de platos, como las patatas fritas, los huevos fritos o muchos bocadillos.

Su origen se encuentra en el ketsiap chino, una salsa que acompañaba el pescado y la carne, pero que no tenía tomate. Los ingleses lo importaron en el siglo XVIII y no fue hasta un siglo después, en 1876, cuando el norteamericano Henry J. Heinz le añadió tomate e inventó lo que hoy conocemos como kétchup.

Qué pasa si tomas kétchup todos los días

El kétchup se elabora con tomate y sal como productos básicos a los que, después, se les añade azúcar, vinagre y mezclas concretas de especias y hortalizas. Lo habitual es comprarlo envasado y, a diferencia de la tradicional salsa de tomate, no incluye aceite entre sus ingredientes y, sin embargo, sí mayor cantidad de azúcar que ésta, que simplemente lo emplea para corregir el punto de acidez.

Es una salsa habitual en todas las mesas del mundo, sobre todo y especialmente en las que hay niños. Y es que se trata de un producto muy estimado por los más pequeños de la casa, que pueden añadirlo sin problemas casi a cualquier plato.

Sin embargo, ¿alguna vez te has parado a pensar qué ocurre cuando tomamos habitualmente una salsa de este tipo? Pues según diversos estudios, nada bueno para nuestro organismo.

Y es que el consumo continuo y masivo de kétchup puede generarnos numerosos problemas de salud como:

• Enfermedades cardiovasculares: el kétchup contiene muchos azúcares y sodio, algo que puede aumentar los niveles de colesterol y triglicéridos y, por ende, afectar seriamente al corazón y las arterias.

• Obesidad: la gran cantidad de azúcares del kétchup se traducen en un aporte excesivo de calorías al organismo y, por tanto, un incremento del peso. Además, el superávit de glucosa disminuye la capacidad de absorción de las células y, finalmente, se genera una resistencia a la insulina.
• Trastornos digestivos: el kétchup es una salda con muchos ácidos, lo que puede provocar acidez y pirosis, por no hablar de no ser nada recomendable cuando se sufre de gastritis o úlcera gástrica.
• Dolencias renales: el elevado contenido de sodio del kétchup ocasiona que suban los niveles de calcio en la orina, lo que se traduce en un aumento de la posibilidad de desarrollar cálculos renales.
• Sistema inmune debilitado: la salsa kétchup no contiene fibra ni proteínas y su valor nutricional es mínimo, lo que puede degenerar en un sistema inmunológico frágil y que no cumpla correctamente su función.

Tomar todos los días kétchup no es, por tanto, una costumbre muy sana. En general, no se debería de abusar de las salsas, ya que suelen disparar el número de calorías y, sin embargo, su valor nutricional es escaso, algo que no beneficia a nuestro organismo.