Cómo curar una lesión de tobillo

El pie y el tobillo constituyen una de las partes fundamentales del aparato locomotor. Debido a su uso diario, estos están expuestos a sufrir caídas, golpes y un gran estrés que, en ocasiones, derivan en lesiones que suponen limitaciones para realizar un gran número de tareas de la vida diaria y, por tanto, una pérdida importante de la calidad de vida.

En este punto, cabe destacar que la práctica deportiva de forma habitual aumenta el riesgo de sufrir algún tipo de lesión en el pie o el tobillo. “Las más comunes son los esguinces de tobillo, que representan una parte importante de las lesiones deportivas”, asegura el doctor Álvaro Daras, especialista de la Unidad de Pie y Tobillo del Hospital Quirónsalud Valencia.

Cómo evitar las lesiones deportivas

Según el doctor Daras, el hecho de que se produzcan este tipo de lesiones con tanta facilidad en estas zonas se debe a que “están en constante movimiento y soportan mucha carga”. Además, existen factores que contribuyen a aumentar el riesgo de padecer dolencias, como “una mala técnica, la fatiga muscular, el uso de calzado inadecuado, pisadas descompensadas o la falta de calentamiento”, entre otras.

¿Qué deportes presentan una mayor incidencia de lesiones?

Existen modalidades deportivas que, debido a sus características, conllevan un mayor riesgo de sufrir lesiones en los pies y los tobillos. “Fútbol, baloncesto, pádel y voleibol destacan por su alta incidencia, ya que son deportes que implican saltos, giros, frenadas bruscas y contacto; también el trail running, por la irregularidad del terreno”, apunta el doctor Pablo Vila, especialista de la Unidad de Pie y Tobillo del Hospital Quirónsalud Valencia.

Además, en función del tipo de deporte, estas lesiones afectan de forma más común al tobillo o a la zona del pie. “En deportes de impacto y cambios de dirección, como el fútbol, el baloncesto o el pádel, el tobillo sufre mucho; en cambio, las sobrecargas propias de los corredores o triatletas afectan más al pie, provocando tendinitis, periostitis o fracturas por estrés”, subraya el doctor Vila.

Según el doctor Vila, también existe una diferenciación entre los deportes de contacto, que conllevan “más lesiones traumáticas como esguinces, contusiones o fracturas”, y los deportes individuales de resistencia, en los que predominan “las lesiones por sobrecarga, como tendinopatías, fascitis o fatiga ósea”.

Otro factor determinante en este sentido es la superficie sobre la cual se practica cada deporte. Así pues, según el doctor Daras, aquellos deportes que se practican en asfalto o pista dura (como el running, el pádel o el tenis) “incrementan el impacto y la carga repetitiva, sobre todo si no se usa el calzado adecuado o no se gestiona bien el volumen de entrenamiento”.

Diagnóstico y tratamiento del esguince de tobillo y otras lesiones deportivas

El esguince de tobillo es una de las lesiones más frecuentes con las que se enfrenta el fisioterapeuta deportivo y suele representar el 25% de todas las lesiones relacionadas con el deporte. “La clave es el diagnóstico precoz con exploración y pruebas de imagen para tratar a tiempo y evitar complicaciones”, explica el doctor Vila.

En este punto, el doctor Daras añade que “la exploración física sigue siendo clave, pero la ecografía musculoesquelética nos permite evaluar tendones, ligamentos y estructuras blandas en tiempo real. También usamos resonancia magnética y radiografías para lesiones óseas o más profundas”.

Entre los tratamientos más comunes para este tipo de lesiones se encuentra el reposo relativo, la crioterapia, los vendajes funcionales, la fisioterapia y, en ocasiones, plantillas personalizadas. Sin embargo, en el caso de que existe una rotura o inestabilidad en la articulación, puede requerirse cirugía.

“La cirugía se plantea cuando el tratamiento conservador ha fracasado o cuando la lesión, por su gravedad, no permite una recuperación funcional sin intervención -afirma el doctor Daras-. Un ejemplo claro sería una fractura desplazada del astrágalo o una rotura completa de ligamentos que genera una inestabilidad severa en el tobillo. Además, según el especialista, “en ciertos pacientes también abordamos quirúrgicamente fascitis plantar crónica cuando ha fallado todo lo demás”.

En los últimos años, la cirugía para lesiones de tobillo y pie ha avanzado notablemente. “La cirugía mínimamente invasiva ha supuesto una revolución -confiesa el doctor Daras-. Con técnicas astroscópicas podemos reparar lesiones intraarticulares, eliminar cuerpos libres o reconstruir ligamentos sin necesidad de grandes incisiones, lo que se traduce en menos dolor, menor riesgo de complicaciones y una recuperación más rápida”.

La Unidad de Pie y Tobillo del Hospital Quirónsalud Valencia es la primera en València especializada únicamente en patología ortopédica y traumática del pie y tobillo. El equipo médico de la unidad ofrece las técnicas más novedosas en el campo de la medicina y cirugía ortopédica, basadas en técnicas quirúrgicas mínimamente invasivas -como la cirugía percutánea o la artroscopia- y en técnicas más complejas y avanzadas que permiten corregir las deformidades más severas.

¿Los deportistas pueden volver al mismo nivel tras la operación?

Según el doctor Daras, “sí, muchos incluso vuelven mejor de lo que estaban. Eso sí, el protocolo de recuperación debe ser estricto, progresivo y supervisado. Hay que respetar los tiempos biológicos”.

En este sentido, la rehabilitación es clave. “La operación resuelve el problema anatómico, pero la recuperación funcional depende totalmente de la rehabilitación”, apunta el doctor Daras. Para ello, “necesitamos controlar el dolor y la inflamación, recuperar movilidad, fortalecer musculatura y readaptar al gesto deportivo. Sin eso, la cirugía por sí sola no es suficiente”, advierte el doctor.

Solicita más información acerca del tratamiento de las lesiones de pie y tobillo en el Hospital Quirónsalud Valencia