El virus del papiloma humano (VPH) es, según establece la Organización Mundial de la Salud (OMS), “la infección viral más frecuente del aparato reproductor” y la causa de “diversos trastornos —tanto en hombres como en mujeres—, incluidas ciertas lesiones precancerosas que pueden progresar a un cáncer y las verrugas genitales”. 

Si bien la mayoría de las infecciones por este virus no producen síntomas y estos desaparecen de forma espontánea —existe más de un centenar de tipos de VPH que se identifican a través de un número—, la infección persistente puede dar lugar a enfermedades, sobre todo en mujeres.

De hecho, casi la totalidad de casos de cáncer cervicouterino (99 %) están relacionados con una infección genital por el virus del papiloma humano.

Se trata, por tanto, de una de las infecciones de transmisión sexual más frecuentes del mundo y presenta, como establece el monográfico Virus del papiloma humano y cáncer: epidemiología y prevención, elaborado por la Sociedad Española de Epidemiología, “una asociación causal muy particular principalmente con el cáncer de cuello uterino, el segundo cáncer más frecuente en las mujeres a nivel mundial”.

El pronóstico, pese a la consolidada campaña de vacunación, no es alentador. Cuatro de cada cinco personas sexualmente activas contraerán el VPH en algún momento de su vida. Ante el presagio estadístico, ¿qué alternativas médicas existen?

En qué consiste la conización

El cáncer de cuello uterino supone el segundo tumor maligno en mujeres de entre 15 y 44 años en España. La prevención resulta, como en cualquier tipo de patología, esencial para la salud. En este sentido, la conización es la intervención más efectiva cuando ya se ha presentado una lesión preneoplásica. Pero, ¿en qué consiste?

Quirónsalud València ofrece a sus pacientes el tratamiento preventivo de la conización. ED

Como explica el doctor Victor Martín, especialista en Cirugía Ginecológica de Quirónsalud València, “es una intervención quirúrgica menor en la que se extirpa una pequeña porción de cuello de útero” y tiene como objeto el  tratamiento para las lesiones precancerosas en dicha zona.

Es decir, la conización se realiza a mujeres diagnosticadas de una lesión precancerosa o premaligna en el cuello uterino. Además, este técnica permite abordar la existencia de un tumor incipiente.

¿Cómo se realiza la intervención?

Según explica el especialista de Quirónsalud València, la conización se realiza por vía vaginal con “anestesia locorregional tipo raquídea o bien una sedación profunda”. 

Para la sección del tejido cervical, detalla, “habitualmente se utiliza electrobisturí o asas de diatermia”. Esto consigue una sección del tejido más precisa y con menos sangrado.

Se trata, por tanto, de una técnica ambulatoria mínimamente invasiva e indolora que no requiere ingreso hospitalario, tan solo observación durante las primeras horas posteriores a la intervención.

El cáncer de cuello de útero está estrechamente vinculado a la infección por VPH. ED

Aspectos a tener en cuenta tras una conización en el útero

El doctor de Quirónsalud València explica que es recomendable realizar un reposo relativo los primeros cuatro días, así como “evitar la introducción en vagina de elementos que pudieran lesionar la zona intervenida y hacerla sangrar”, como tampones, o mantener relaciones sexuales durante las primeras cuatro semanas, la paciente deberá visitar al ginecólogo antes de realizar una vida normal.

Del mismo modo, el doctor Martín aconseja no sumergirse en piscinas o la playa así como evitar duchas vaginales las primeras tres semanas.

¿La conización tiene secuelas?

“Si no hay complicaciones, las cuales son extraordinariamente infrecuentes, no queda ningún tipo de secuelas”, asegura el doctor Victor Martín, especialista en Cirugía Ginecológica de Quirónsalud València.

Un aspecto a destacar es que la cirugía de conización no modifica la futura consecución de un embarazo, según señala el doctor. “En embarazos postconización y, sobre todo cuando la resección de tejido cervical ha necesitado ser muy extensa, existe un mínimo aumento de riesgo de parto prematuro comparado con embarazos de mujeres sin conización previa”, puntualiza.

Conización: ¿solución definitiva?

En este punto, es importante apuntar que, si bien la conización no cura la infección por VPH, sí elimina el tejido preneoplásico cervical que se puede originar tras una infección persistente y activa.

Aunque es posible que el virus “persista en otras localizaciones del aparato genital”, señala el especialista de Quirónsalud, por lo que es posible que aparezca nuevamente el mismo tipo de lesión. “De ahí la necesidad de controles ginecológicos más estrechos en este tipo de pacientes”, insiste el doctor.

Otras recomendaciones para prevenir la infección por el virus del papiloma humano una segunda vez son:

  • Uso de preservativos
  • No fumar
  • Vacunación contra el cáncer de cuello de útero

Por último, el especialista de Quirónsalud València recomienda acudir periódicamente al ginecólogo para realizarse una citología. Solicita más información acerca de la conización en el Hospital Quirónsalud València.