El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, ha pedido a todos los fieles valencianos, que la Semana Santa sea en toda la diócesis "un clamor por la paz, especialmente en Siria", durante la celebración de la solemne misa del Domingo de Ramos que ha presidido en la Catedral.

Así, el Cardenal ha señalado que "ante un mundo tan violento y tan amenazado", desde nuestra región "se eleve un clamor universal de toda la garganta de los cristianos implorando la paz", en Siria y tantos otros lugares, "pidiendo el respeto a la dignidad de cada persona humana, donde se superen todas las exclusiones y se construya verdaderamente la unidad, dejando atrás viejos odios".

En este sentido, el Arzobispo ha pedido a todos los fieles que todos los actos de esta Semana Santa sean "expresión de ese clamor por la Paz" y "una petición de perdón, por la violencia". Igualmente, ha invitado a que "todo lo que hagamos sea expresión del amor y la misericordia, de estar al lado de los últimos y de los que sufren".

Antes de la eucaristía, el Cardenal ha bendecido, en la puerta románica de la Almoina, los ramos de olivo, laurel y las palmas de los feligreses que han participado en la eucaristía.

Tras la bendición de palmas, el cardenal Cañizares, junto con el clero de la Seo, ha recorrido en procesión la plaza de la Virgen y la calle del Miguelete, hasta entrar a la Catedral por la Puerta de los Hierros.

El significado religioso de la procesión del Domingo de Ramos "lo conmemoraban ya los peregrinos en el siglo IV, cuando bajaban desde el monte de los Olivos hasta Jerusalén, con ramos de olivo y palmas simbolizando la entrada de Jesús en la ciudad", según han señalado fuentes del Cabildo Catedralicio a la agencia AVAN.