La Semana Santa Marinera ha conseguido un consenso en presencia que rivaliza claramente incluso con las Fallas, porque no es lo mismo dos horas de desfile que acudir al balcón de la «mascletà». Y aún así, y sin misas de por medio, la clase política se dio cita en el desfile de forma copiosa. Pero la gran novedad fue la presencia del presidente de la Generalitat, Ximo Puig. «Hace ya tiempo que quería venir. Siempre vengo en algún momento de la Semana Santa Marinera, pero hace tiempo que Sandra (Gómez) me decía que tenía que ver este desfile. Por supuesto que lo conocía y me gusta porque es único. No creo que otra ciudad celebre la Resurrección de esta manera. Y es, sobre todo, una explosión de mediterraneidad. Es la primavera valenciana. Y es importante que las raíces culturales de nuestra identidad estén bien presentes, como también la alianza entre las distintas generaciones, que quieren ser fieles a su tradición». Y caracterizada por esa pluralidad política. «Eso es la convivencia y eso es lo bueno que tiene esta tierra. Este acto es el más relevante de los ejemplos».

Un año más se echó de menos al alcalde, Joan Ribó, aunque su ausencia en este tipo de eventos parece estar ya, de alguna forma, asumida como algo irrevocable. Compromís estuvo representado en el palco y en el desfile por los ediles Pere Fuset y Carlos Galiana. Algo parecido al PP municipal con Félix Crespo (en su primera presencia oficial tras el grave problema de salud sufrido semanas atrás) y Eusebio Monzó, respectivamente. Ciudadanos se quedó con el desfile de Fernando Giner (Amparo Picó estaba enferma y Manuel Camarasa acudió a la Semana Santa de Moixent), mientras que varios concejales socialistas acudieron a jalear a la portavoz Sandra Gómez, quien incluso fue grabada por Ximo Puig cuando pasó por delante de la tribuna.

El presidente de la junta Mayor, Paco Carles, anunció que ya buscan en el horizonte la declaración como Fiesta de Interés Turístico Internacional. «En 2011 se declaró Nacional y estamos haciendo gestiones. Hemos salido ya en prensa inglesa y francesa y estos documentos nos valen para intentar ser internacional. Muchas veces nos quejamos de que, con lo especial que es nuestra Semana Santa tenga mucha menos repercusión nacional que otras, con la cantidad de cosas que ofrece. Pero estamos en ello. Tenemos mucho para ofrecer y un patrimonio inmenso», declaró.

Agradecidos a Cañizares

También acaba un curso caracterizado por el desencuentro en la parroquia de Santa María del Mar. «Pero fue un problema en el que el obispo Arturo Ros intervino y no ha habido ya problema. Las homilías han estado todas llenas en todas las parroquias», zanjó.

Lo mismo que la presencia del cardenal Antonio Cañizares tras haberse decantado claramente por los festejos de Ciutat Vella, este año ha estado hasta en tres días, pregón aparte. «Ha sido una buena noticia. Porque además sabemos que es un gran sacrificio. Igual que digo que me sorprendió la cantidad de gente que acudió al Vía Crucis del centro. En el ayuntamiento tienen claro que la Semana Santa de València es en los Poblats. No nos parece mal que las parroquias hagan Vía Crucis y Entierros, pero la Semana Santa Marinera es Marinera y de València».