Numerosas librerías, tanto de Valencia como de sus poblaciones próximas así como del resto del país, comenzaron ayer a retirar de la venta y a devolver a la editorial Planeta la obra de Fernando Sánchez Dragó Dios los cría...y ellos hablan de sexo, drogas, España, corrupción... en señal de protesta.

En la obra, firmada por el escritor junto al dramaturgo y director de escena Albert Boadella, Sánchez Dragó cuenta cómo tuvo sexo con dos menores japonesas en 1967. Ayer, el propio escritor, y dado el cariz que comienza a adquirir la revelación, volvía a pedir "disculpas" a quienes se hubieran sentido ofendidos al tiempo que calificaba el hecho de "anécdota trivial" convertida en literatura, ya que juraba por su "honor" que "nunca" había tenido "trato erótico con menores".

Sin embargo, sus declaraciones no fueron suficientes para que una parte del sector editorial mostrara su frontal rechazo a la publicación optando por su retirada, al tiempo que en determinados foros de internet se animaba a secundar la protesta. Sánchez Dragó describe a las menores como "unas lolitas, pero no eran unas lolitas cualesquiera, sino de esas que se visten como zorritas, con los labios pintados, carmín, rímel, tacones, minifalda. Tendrían unos 13 años. Subí con ellas y las muy putas se pusieron a turnarse..."

Ayer fuentes del Gremi de Llibrers admitían que la comunicación entre las librerías había ido en aumento ya que todas ellas mantienen un mismo sistema de comunicación interno y se estaban recibiendo correos electrónicos animando a la retirada.

De hecho, diversas librerías confirmaron a Levante-EMV que ya habían emprendido la acción. "Parece sorprendente que una editorial que el pasado año premió una novela que defiende a las mujeres publique ahora esto ¿Nadie revisa lo que publica?", manifestaba a este diario una de las librerías que había decidido retirar el libro.

Mientras tanto, la directora general de Telemadrid se lavaba las manos respecto al despido de Sánchez Dragó de la cadena pública donde presenta un programa y solicitado por el Comité de Empresa.

Para el comité, el relato de Sánchez Dragó tiene un contenido pederasta.

Sin embargo, para la directora general de Telemadrid, Isabel Linares "este tema no es competencia del Consejo" del ente.

Para el comité de Telemadrid, "es absolutamente inadmisible que un tipo que presume de haber mantenido relaciones sexuales con niñas aparezca en una empresa de comunicación pública".

Mientras tanto, en un correo electrónico remitido desde Japón el escritor intentó ayer de nuevo zanjar el "estúpido debate abierto por la maledicencia, la hipocresía, el sectarismo y el sensacionalismo en torno a una nimiedad", que ha provocado el libro.

"Es verdad que lucían minifaldas, taconazo y maquillaje atrevido", aseguraba ayer Dragó quien añadió que charló con el grupo, se fue a tomar un café y que allí "dos de las chica" coquetearon con él.

Pero precisó: "Todo fue inocente y amistoso. Apenas hubo contacto físico: cogernos de la mano, mirarnos a los ojos, algún beso furtivo en la mejilla". "Es cierto que me excitaron. ¿A quién no? Eran monísimas, simpatiquísimas y coquetísimas", añadía el escritor, que subrayaba que las jóvenes "no tenían trece años" y que en el libro les asignó esa edad "por dar un pellizco de pimienta" al relato.