A bordo de un globo, un mensaje viajó 600 kilómetros desde la localidad francesa de Agen hasta Alcaine en Teruel. La idea fue de unos recién casados. El 1 de septiembre de 2012 se casaron y lanzaron al aire un globo con una foto de su boda plastificada y una nota. Después de recorrer 600 kilómetros y atravesar los Pirineos fue a caer en un apartado paraje de caza turolense.

Lucas Muñío, un jubilado, caminaba por el campo en busca de alguna presa cuando vio enganchados en una aliaga los restos del globo pinchado y algo atado con un lazo rojo: la fotografía y la nota, escrita en francés. Junto al alcalde de Alcaine, Cipriano Gil, y tal como pedía la pareja gala en su texto respondieron al mensaje. Causalmente, Lucas Muñío fue uno de los españoles que emigraron a Francia en la década de los sesenta del siglo pasado y vivió allí durante cuarenta años.

La romántica historia, publicada por la prensa local, ha encontrado un enorme eco mediático. El alcalde de Alcaine ya considera a Muñío todo un "embajador" del pueblo, un pequeño municipio de las Cuencas Mineras que tiene apenas 69 habitantes censados y que estos días se ha visto "tomado" por cámaras y reporteros.

Cédric y Rachida se casaron el 1 de septiembre de 2012 en la localidad francesa de Agen (situada entre Burdeos y Toulouse) y tuvieron la idea de compartir con el mundo su felicidad.

La nota decía: "El 1 de septiembre de 2012 supuso para ella y él, Cédric y Rachida, un bello matrimonio y para este globo un bello viaje, el que encuentre este globo que nos cuente a nosotros su historia. Gracias". El alcalde, Cipriano Gil, le ha facilitado a Lucas una foto con una vista panorámica del pueblo para enviarla a los remitentes y se están planteando invitarles formalmente a visitar Alcaine.