El expresidente del Gobierno Felipe González ya tiene su retiro preparado. Será en la sierra de Guadalupe (Cáceres) y en una tranquila finca, llamada "El Penitencial".

El terreno cuenta con una extensión de 120 hectáreas y ha costado un millón de euros, que el expresidente del Gobierno habría pagado al constructor Joaquín Vázquez Alonso, dueño de la finca matriz, "El Común".

"El Común" cuenta con más de 2.000 hectáreas y tiene una reducida zona, denominada "El Penitencial" y que ahora sería propiedad de Felipe González y su segunda esposa, Mar García Vaquero.

Al parecer, la intención del expresidente es reformar "El Penitencial" por lo que las licencias de obra se solicitaron a primeros de junio pasado y las obras comenzaron a principios del verano. Pero en su intento de pasar inadvertido, González no inició estos trámites personalmente, sino que lo habría hecho la empresa Agrícola El Común S.A, propiedad de Vázquez.

Incluso, según adelanta La otra crónica, la hija del expresidente, María, llamó recientemente al ayuntamiento de Villar del Pedroso -localidad por donde pasa la finca- para solicitar la documentación necesaria para empadronar a un matrimonio rumano que serían los guardeses de la finca.

Invitados ilustres

En cuanto al dueño primigenio de la finca, de Joaquín Vázquez Alonso, se sabe que el constructor es amigo del expresidente desde, al menos, los años 80, ya que González era uno de los invitados más ilustres en la finca del constructor, amigo íntimo del rey Juan Carlos y Mario Conde. Al primero le reformó La Zarzuela. A Conde le hizo las obras de la finca Los Carrizos, que el exbanquero posee en Sevilla. Hombre bien relacionado, Vázquez -cuyo hermano fue alcalde de Guadalupe-, ha recibido en su finca a ilustres personalidades como al rey, González o a las hermanas Koplowitz.