Un empleado de una ferretería de New Brighton, en Minnesota, se enfrenta a una pena de hasta un año de cárcel y a 4.500 $ de multa por eyacular en la taza de café de una compañera de trabajo para llamar su atención.

La historia, según informa CBS Minnesota, se remonta al pasado 26 de agosto cuando la empleada vio a su compañero en actitud sospechosa con las manos en la entrepierna cerca de su lugar de trabajo y llamó a la policía denunciando que su compañero había vertido fluidos corporales en su escritorio. La afectada explicó a los agentes que ya había tenido problemas antes con su compañero y le amenazó con denunciarlo.

El acusado confesó ante la policía que había eyaculado cuatro vesces en el escritorio de su compañera de trabajo y dos en su café en los últimos seis meses para llamar su atención, mostrar que se sentía atraído por ella y que ésta lo notase.

La denunciante explicó a los agentes que había notado extraño el sabor de su café en numerosas ocasiones pero pensó que se debía al mal estado de la crema.