'Cecil' era la estrella de la reserva de Hwange, en Zimbabue. Era el más grande de la región y el rey de una manada de tres leonas y siete cachorros. Su espectacular belleza no sólo era objeto de deseo para los turistas si no también de los cazadores. En concreto de uno español, que pagó 50.000 euros para poder matar al ejemplar de 13 años y al que engañaron para poder sacarlo del parque y le colocaron un animal muerto como cebo.

"Le dispararon por la noche con arco y flechas para no hacer ruido y estuvo desangrándose hasta que lo remataron con rifles por la mañana. Podría considerarse una caza furtiva", explican Luis y CJ Muñoz, de Chelui4lions, colaboradores de varias ONG surafricanas y españolas.

La tragedia no acabó aquí. El nuevo macho de la manada mató a los cachorros de 'Cecil' para que las leonas se dispusiesen de nuevo a procrear.