La factura del agua no es la más gravosa pero recortarla tiene una satisfacción adicional: beneficia al medio ambiente. El ahorro de agua en nuestros hogares no es una utopía. A continuación le ofrecemos una serie de consejos que le serán muy útiles.

Dispositivos de ahorro de agua

Cerrar el grifo mientras se lavalos dientes, se enjabona, se afeita... es una medida básica para ahorrar agua. Pero ese ahorro se puede mejorar con grifos más eficientes.

Puede averiguar el caudal de sus grifos, dejándolos correr un minuto y midiendo el agua recogida. Si se pasan de 8 litros, son derrochadores.

Si la grifería de su casa es antigua, tiene fugas, va a hacer una reforma€ es el momento de adquirir grifos más ahorradores. Por ejemplo, grifos reductores de caudal, o los grifos termostáticos, que consiguen un ahorro de agua y energía y facilitan los hábitos de ahorro.

Pero en los grifos más antiguos es posible instalar dispositivos de ahorro de agua como los limitadores de caudal: que reducen el caudal en función de la presión del agua. Algunos modelos se intercalan entre la llave de corte y el latiguillo del grifo (o entre el grifo y el flexo de la ducha).

Los hay que se colocan sin necesidad de desmontar el grifo, mientras que otros que tienen el mecanismo en un cartucho obligan a intervenir a un profesional. Algunas marcas tienen también mangos de ducha con el dispositivo ahorrador ya incorporado.

También hay otros accesorios denominados interruptores de caudal. Son adecuados para instalar en un grifo convencional de dos ruedas, ya que permiten reanudar la salida del agua sin tener que volver a regular la temperatura del agua.

En tercer lugar hay que citar los aireadores o perlizadores: estos dispositivos mezclan aire con el agua, incluso si la presión es baja. Las gotas de agua salen en forma de perlas y dan la sensación de que el chorro es abundante. Asegúrese de que la rosca coincide con la del grifo.

Ducha para ahorrar agua

Llenar la bañera precisa al menos 200 litros, mientras que una ducha de cinco minutos gasta la cuarta parte. En la ducha, además de cambiar la grifería, es posible acoplar un cabezal que suelte poca agua, aunque el efecto sea de chorro abundante.

El ahorro de agua se puede lograr con un cabezal de mezcla con aire: el chorro proporciona la misma sensación de mojado pero sólo se consume la mitad de agua. Esta medida suele ir acompañada de un aumento de la presión de salida y un aumento del tamaño de la gota (gota perlizada).

El ahorro en el inodoro

En la actualidad, la mayoría de los botones de descarga de la cisterna son de doble pulsador. Seis litros es una cantidad más que suficiente, y en caso de aguas menores con 3 litros es suficiente.

Si su cisterna es antigua, puede convertirla en ahorradora manteniendo la carcasa cerámica y cambiando el dispositivo interno conocido como universal por un dispositivo ahorrador.

Otra opción consiste en colocar un limitador de descarga en el tubo del rebosadero o sobre la válvula del descargador del inodoro: al tirar de la cisterna de forma normal se produce una descarga de unos 3 litros, y si se mantiene el tirador sujeto durante 3 o 4 segundos, se vacía por completo.

Otros consejos

El gasto de lavar la vajilla dos veces al día oscila entre los 120 litros si se hace a mano con el grifo abierto, o los 60 litros si se utiliza la pila llena de agua y los 25 litros si se pone el lavaplatos una vez al día. Téngalo en cuenta.