En las últimas décadas han surgido muchas iniciativas, especialmente de empresas privadas, para aumentar la inversión en energías alternativas. La energía minieólica es una de esas energías alternativas que puede incrementar el desarrollo económico en países en vías de desarrollo. También estos miniaerogeneradores en ciudades pequeñas o pueblos permiten el acceso a la telefonía móvil, por lo tanto esta energía es un motor de integración no sólo económica sino social. La energía minieólica, al contrario de la energía eólica, se basa en instalar aerogeneradores pequeños de viento en zonas urbanas, mientras que la energía eólica es típica de zonas rurales. La investigación del clima urbano de las diferentes ciudades del mundo es necesaria para permitir conocer las posibilidades que tienen las diferentes zonas urbanas para instalar aerogeneradores. Debemos tener en cuenta que se necesita una velocidad mínima para obtener un rendimiento óptimo de los aerogeneradores, 6 km/h. Por lo tanto si en las diferentes áreas de una ciudad tenemos pocas horas durante el año o gran parte de los meses del año la inversión en esta energía puede ser fallida, ya que no funcionarán con un rendimiento óptimo. Por otra parte, también las velocidades muy elevadas del viento, típicas de los ciclones tropicales o de ciclogénesis explosivas, pueden provocar destrozos en los aerogeneradores. Por lo tanto es necesario conocer la distribución y frecuencia relativa y acumulada de los diferentes intervalos de velocidad del viento para instalar estos miniaerogeneradores de viento.
