Vamos a estar animados con este tema durante los próximos días y semanas. La Conferencia de las Partes de los países que firmaron en 1992 la Convención Marco de Naciones Unidas sobre cambio climático y que se reúne anualmente en una ciudad del mundo, llega ahora a Madrid, que ha asumido la organización, inicialmente encargada a Chile, como sabemos. Veremos pasar por las salas de IFEMA a científicos, políticos y organizaciones sociales cada uno con sus objetivos y tareas a desarrollar allí, pero todos guiados por la preocupación de lo que está pasando con el clima mundial y de lo que puede pasar. Hay dos cuestiones, poco conocidas, que se van a debatir en los próximos días y de cuyo resultado dependerá, en gran medida, el futuro de las acciones de mitigación y adaptación ante el calentamiento climático actual. La primera, el llamado Mecanismo de Varsovia que se estableció en la COP 13 celebrada en Bali en 2007 y que es un comité ejecutivo específico para el impulso y evaluación de planes de adaptación de los países a los efectos extremos del cambio climático. Esto es, es el mecanismo de relación entre el cambio climático y el aumento de los riesgos vinculados con este proceso (inundaciones, huracanes, sequías, temporales, tornados, etc.). En el Cuarto Informe del IPCC aprobado precisamente en 2007 se puso de manifiesto la relación entre el calentamiento climático y el aumento de episodios extremos atmosféricos. El Quinto informe del IPCC (2013-14) vino a confirmar definitivamente este hecho. Y la segunda, la puesta en marcha del Libro de Reglas de Katowice se aprobó por los países firmantes del Acuerdo de París el año pasado (2018), y viene a ser una hoja de ruta con los principios básicos que los países deben cumplir a la hora de elaborar sus planes de reducción de emisiones y de adaptación al cambio climático. Es una especie de hoja de ruta hacia la transparencia en la información que deben proporcionar los países en sus acciones para el cumplimiento del Acuerdo de París. Es un documento importante porque debe guiar los procesos que los países deben realizar para llevar a cabo el llamado "Diagnóstico Global" del Acuerdo de París en 2023, con el detalle de los países en materia de reducción de emisiones, planes de adaptación y sus mecanismos de financiación concretos. Confiemos en que esta Cumbre sirva, realmente, para poner en marcha medidas concretas. La labor a realizar es importante.