Las lluvias, el viento y las tormentas han vuelto a ser noticia en el Mediterráneo. En pleno temporal, la AEMET llegó a lanzar un total de 46 avisos para el miércoles, la mitad de ellos en color naranja por riesgo importante. En la zona del litoral, muchos de esos avisos estaban relacionados con el viento y el oleaje. Un temporal de levante donde se esperaban olas de 3 a 5 metros desde Alicante hasta Girona. Días de fuerte oleaje en el mar Mediterráneo que nos recuerdan al temporal marítimo acaecido entre el 21 y 22 de enero del 2017. Ese episodio dejó varios récords de altura en las olas del Mediterráneo. Según el Ministerio de Fomento, en Valencia se llegó a registrar una ola de 6,45 metros de altura, la más alta en la capital desde 2009. Este episodio de viento y oleaje, se «tragó» las playas, viviendas y numerosos paseos marítimos de Alicante, Castellón y Valencia. Las boyas batieron registros históricos en Valencia, Cabo de Palos, Tarragona, Dragonera y Barcelona. En Cartagena se llegó a registrar una altura significante de ola de 6,33 metros, superando el récord del 2013 de 5,7 metros. También Dragonera y Tarragona llegaron a los 6,33 metros de altura. Más «modestas» fueron las de Barcelona que aún así llegaron a 4,97 metros de altura.

En la costa de la geografía española tenemos repartidas distintas boyas que miden la altura, el período, la temperatura del agua y otras variables. Habitualmente, una de las zonas donde las olas son mas grandes es en el Cantábrico y en Galicia. La boya que ha registrado la ola más grande en el país ha sido la de Villano-Sisargas en el cabo Vilán en la costa de Pontevedra. Se registró el 6 de enero de 2014, ¡con 27,81 metros!