Una tortilla de patatas se ha convertido en un quebradero de cabeza para Jon Kortajarena. El modelo internacional se ha visto envuelto en una polémica en redes sociales que le ha obligado a retractarse y pedir disculpas. Kortajarena ha tenido que recular tras compartir en su perfil una conversación con Glovo, una empresa de servicio de comida a domicilio, tras un retraso de más de dos horas en su pedido.

El actor publicó la conversación en con la empresa de reparto a domicilio tras el retraso en el pedido. “Lo de Glovo es una vergüenza, si no podéis dar un servicio no lo deis”, afirmaba en la charla en la que la compañía justificaba "en la situación actual" la tardanza. "Quiero saber cuándo cojones me váis enviar la tortilla", insistía el modelo. Ante la ausencia de un repartidor asignado y la imposibilidad de confirmarle una hora de entrega, Kortajarena reclamó la cancelación del pedido. "Manda huevos", zanjó.

Sin embargo, lejos de resultar efectivo, el modelo logró despertar las críticas de sus seguidores en Instagram y la solidaridad de estos con los 'riders' o repartidores, cuya situación laboral está más que cuestionada por una parte de la ciudadanía.

La polémica ha sido tal que el modelo vasco ha publicado varios vídeos disculpándose por su actitud y afirmando que no volverá a utilizar los servicios de la empresa de reparto de comida a domicilio tras conocer la situación de sus trabajadores. Además, Kortajarena ha querido justificar su 'desesperación' en redes: el modelo voló de Los Angeles a Londres y de ahí a Madrid, desde donde condujo un coche hasta Bilbao para estar cerca de su madre, que ha dado positivo en coronavirius. Así, Kortajarena aseguró que en todas las horas de vuelo, solo había podido comer una chocolatina. A la próxima, Kortajarena no dudará en cocinarse él mismo la tortilla.